17. El sendero de las luciérnagas - primera parte

WAAAAAAAAAAAAAH

Tsubasa/Tsukawa: ¡Es un parque acuático! –ambas chicas alzaban las manos mientras las rodeaban brillos, corazones y flores; estaban muy emocionadas por llegar a ese lugar, era un parque acuático donde había diferentes clases de toboganes y piscinas, era temprano pero ya había gente en algunas zonas, todos los demás arreglaban sus cosas en algunas mesas mientras que las dos hermanas seguían admirando el lugar-

Tsubasa: ¡Mira cuantos toboganes hay Wawa! y seguro hay más al fondo ¡Es el paraíso! ¡Vamos a subirnos en todos! ¡Vamos! ¡Vamos!–Volteando a ver a su hermana mientras alzaba un pulgar y el iris de sus ojos eran estrellas-  

Tsukawa: ¡Vamos a hacer la fila ahora onê-chan! –Apretando los puños con el iris de sus ojos también en forma de estrellas-

 Ambas chicas se sonrieron entre sí entusiasmadas, lanzaron sus sweaters y sus sandalias para empezar a correr al primer tobogán que tenían cerca, pero algo las jaló de regreso haciendo que ambas golpearan la cabeza contra el suelo, ambas se levantaron después de poco tiempo, una tenía una marca en el rostro y la otra tenía un pequeño chichón en la cabeza, se quejaban con lagrimas en los ojos hasta que sintieron las pisadas de alguien frente a ellas.

Tsukasa: Compórtense, saben bien que no se pueden ir hasta que nos acomodemos –dijo deshaciendo su posesión y cruzándose de brazos- recuerden sus modales

Tsubasa/Tsukawa: Peeeeero –se quejaron ambas chicas al mismo tiempo mientras se levantaban y se colgaban de sus hombros-

Tsubasa: ¡Vinimos aquí a divertirnos Tsuki! –Picándole las mejillas con un dedo-

Tsukawa: T-Tsubasa onê-chan tiene razón onê-sama, vinimos aquí a divertirnos, solo por esta vez onê-sama, por favor –apoyándose en uno de sus hombros e intentando darle el mejor de sus pucheros-
 
Tsukasa: Mira nada mas como se comporta Tsukawa gracias a ti –aun con los brazos cruzados y mirando de reojo a su gemela- definitivamente eres un mal ejemplo para ella

Tsubasa: Onê-sama no se siente poderosa el día de hoy, es todo, te desespera que Tsukawa este de mi lado, llevo dos ganadas seguidas, ¿Qué me dices a eso onê-sama? –Sonriéndole altiva; brotaban chispas de sus miradas y a Tsubasa le salía una lengua de serpiente por la boca; llevaba con esa actitud desde temprano, Tsukasa solo la miraba con muchas venas hinchadas en su frente y un tic en una ceja, le provocaba golpearle el rostro pero debía mantener la compostura, respiro profundo, exhalo el aire bueno y después volteo a donde estaba el grupo-

Tsukasa: ¡TSUGUMI! –Chilló desesperada- La matare antes del almuerzo si no para con su juego –señalando a Tsubasa despectivamente quien aun reía para sí mientras se encogía en hombros y miraba a un lado-

Tsugumi: Déjalas que se vayan a jugar –dijo despreocupada mientras movía una mano como si estuviera sacudiendo moscas- así gastarán toda la energía que tienen y se dormirán más rápido en la noche –la rubia ya estaba recostada en una tumbona cerca del lugar donde habían ordenando sus toallas y bolsos; se coloco unos lentes oscuros y se volvió a recostar-

Tsubasa: ¡Ja, Gane otra vez! –Colocando sus manos en la cintura-

Tsukawa: ¿Enserio podemos ir onê-san? –corrió hasta la tumbona y se coloco de cuclillas a un lado para mirar el rostro de su prima- ¿si podemos? –Sonriéndole inocente-

Tsugumi: Ya se los dije, así gastan toda la energía que tienen –sonrió para sí mientras miraba al frente observando la piscina; ambas chicas alzaron las manos victoriosas pero Tsukasa miró un momento a Tsugumi, le pareció muy extraño que no la apoyara en ese momento, la rubia no tardó en darse cuenta y sonrió para sí mientras levantaba su dedo índice-…pero solo podrán ir con una condición –se les escucho un sonoro suspiro y ambas chicas dejaron caer sus brazos desganadas-

Tsubasa: ¿Por qué siempre tiene que haber tantos peros? Solo vamos a unos tontos toboganes –comentó fastidiada- ¿Y qué? Tenemos que ponernos un collar con nuestros nombres o una antena en la cabeza para que sepan dónde estamos o qué

Tsugumi: Solo podrán ir si las acompaña alguien, de lo contrario se quedaran aquí hasta que todos se dispersen –sonriendo de lado- hay que estar alerta en todo momento ¿no es verdad Tsuki? –la joven asintió-

Tsubasa: UGH, está bien, está bien, rayos que molestia –exclamo con fastidio mientras cruzaba los brazos-

Anna: ¿Piensas que soportaré uno más de esos ataques extraños que les pasa cuando están solas? Olvídalo –comento la rubia de repente al acercarse donde estaban ellas reunidas y cruzó los brazos- díganle a cualquiera de los idiotas que vaya con ustedes, ese montón de vagos ya terminaron de acomodar todo

Tsukawa: ¡Ah! Entonces le pediré a Lyserg-s--- -apretó fuertemente sus labios, reacción que hizo a las presentes extrañarse un poco, al momento ella inclino un poco la cabeza y rió nerviosa- le pediré que me acompañe ahora regreso –y literalmente escapó de allí buscando al inglés; Tsubasa aguanto un poco la risa mientras que Tsukasa y Tsugumi sonreían para sí, por su parte Anna se encogió en hombros y volvió a mirar a las hermanas-

Anna: Espero que hoy no pase absolutamente nada, cualquier tonto ataque se ha vuelto una costumbre muy molesta así que asegúrense de estar con alguien porque no me voy a molestar en hacer nada si les sucede algo

Tsukasa: Sentimos todas las molestias que te causamos Anna-san –dijo inclinando un poco la cabeza con algunas gotas en su nuca-

Tsugumi: Hoy todo estará bajo control –acomodándose despreocupada mientras peinaba su flequillo con sus dedos-

Tsubasa: Porq-- -enfadada iba a reclamar pero no pude decir mas ya que su gemela actuó rápido y le cubrió la boca con una de sus manos mientras reía nerviosa-

Tsukasa: Ajajaja…creo que ya es hora que Tsubasa se vaya de aquí y disfrute todos los toboganes del lugar ajajaja ¿no es así Tsubasa? –Golpeando con el codo en una de sus costillas, quien después no le quedo de otra más que asentir mientras bajaba la cabeza algo adolorida-

Anna: Me sorprende como a pesar de todo la defiendes –dijo sin importancia- ahora que ella no me moleste, tomaré algo de sol –se colocó sus lentes oscuro y se fue caminando a la otra tumbona que habían tomado-

Tsugumi: Ya la escuchaste, comportante –riendo para sí viendo como su hermana se quejaba-

Tsubasa: Te odio –decía frotándose a un costado, justo donde su gemela le había dado un codazo-

Tsukasa: No te preocupes, yo también te odio –cruzándose de brazos e intercambiando miradas desafiantes con ella-   

Tsukawa: Onê-chan, si sigues peleando no llegaremos a los toboganes –llegando tomada de la mano con Lyserg mientras tenía sus mejillas infladas-

Tsubasa: Hai, Hai, lo siento –levantando ambas manos, en eso noto quien más acompañaba a su hermana, aparte del inglés venían Chocolove, Horohoro, Hao, Hana e Yoh- uh pero que veo aquí, ¿los niños también quieren ir a jugar no? –sonriendo divertida-

Chocolove: Para algo vinimos ¿no? Hay que disfrutar este parque

Tsubasa: ¡Así se habla Chocolove! –Golpeando fuertemente una mano sobre el hombro del chico- Esa es la actitud que quiero escuchar aquí Jajajajaja –riéndose divertida- hey… ¿Ren no vendrá? –todos los chicos se encogieron en hombros y en eso se acercaron tanto el chino como el pequeño Manta- ¿Ustedes no vendrán? Vengan vamos, será divertido

Ren: No me llaman la atención esa clase de juegos

Horohoro: A ti nunca te llama la atención nada –dijo por lo bajo mientras caminaba a donde estaba Tsukasa; el chino lo miró con rencor mientras que algunos aguantaban la risa-

Tsubasa: Oh vamos Ren no seas así de aburrido –sacándole la lengua- tu si quieres ir verdad Manta –sonriéndole al joven-

Manta: No estoy del todo seguro a decir verda—

Tsubasa: No digas tonterías –interrumpiéndolo mientras lo alzaba de un brazo- estoy segura que te encantará, ahora… –señalando a los toboganes con un dedo mientras que era rodeada por estrellas- ¡vamos a divertirnos señores! –Llevándose con ella a Hao y a Yoh quien llevaba cargado a Hana- apresúrense o tendremos que hacer colas largas en cada juego

Chocolove: Oye, ¡no me dejen atrás! –Dijo el moreno apresurándose detrás de ella, la chica sonreía divertida mientras se los llevaba con ella-

Tsukawa: Regresamos en un rato onê-sama, onê-san –despidiéndose de ambas mientras caminaba con Lyserg para alcanzar a su hermana-

Tsugumi: Ve con cuidado Wawa –la rubia se despidió y se podía escuchar a lo lejos un ‘¡no tan rápido onê-chan-

Horohoro: Bueno supongo que yo también regresaré en un rato –sonriéndole a Tsukasa pero se notaba algo cansado- ten cuidado ¿entendido? –la joven asintió pero lo miró algo preocupada-  

Tsukasa: ¿Sucedió algo malo? Es que te he notado algo decaído

Horohoro: No, no, no, no, solo no dormí bien anoche no te preocupes, volveré en un rato ¿está bien? –Fingiendo mejor la sonrisa, la chica iba comentarle algo pero fue interrumpida-

Tsubasa: BOBO, ¡si no te mueves nos iremos sin tí! –dijo llamándolo desde lejos-

Horohoro: ¡Ahora voy! …esta mujer…cuando será el día que me trate con más respeto –decía quejándose y la chica a su lado rió un poco-

Tsukasa: Que te diviertas entonces, cuídalas por mí por favor –se alzó para darle un beso en la mejilla y después se despidió de él con una mano mientras se reía divertida al ver como Horohoro se tropezaba por donde iba ya que estaba volteado despidiéndose de ella-

Tsugumi: Cuídalas por mí, pero que tierna eres Tsuki –cubriéndose un poco la boca mientras se reía- y le diste un premio y todo para que lo haga jejeje, te ablandas por un hombre que increíble

Tsukasa: ¡T-Tsugumi! –Volteando a verla asustada y con toda la cara roja- n-no digas eso, no me estoy ablandando –la rubia siguió riendo mientras que su prima buscaba una silla para sentarse a su lado toda avergonzada-

Tsugumi: ¿Te quedaras aquí enserio? –Viéndola como se acomodaba y sacaba un libro de su bolso-

Tsukasa: Tu sabes que esa clase de juegos no me llaman mucho la atención además no me conviene ir a caminar sola, prefiero quedarme aquí

Tsugumi: Ahora que lo pienso, nos hubiéramos quedado en el spa con Pilika, Tamao y Jun –Tsukasa la miró un momento pero después la rubia negó- mejor no, así tomo sol aquí, por cierto…en donde esta Ryu, no lo he escuchado desde hace rato

Tsukasa: Lleva allá desde hace un buen tiempo –señalando a Ryu quien estaba en un puesto de comida observando el lugar y de vez en cuando saludaba a las jovencitas, quienes huían asustadas- algunas veces pienso que podría hacer el pobre hombre para agradarle a las mujeres

Tsugumi: Eso es algo imposible –apoyo su cabeza sobre una de sus manos mientras le salían muchas gotas en la nuca- bien, los chicos están en los toboganes, Ryu está lejos de aquí y creo que Ren está-- -ambas se voltearon para ver sí el chico estaba detrás de ellas pero había desaparecido, las únicas en el lugar eran ellas dos y Anna quien estaba recostada y tranquila- que extraño, juro haber oído que él no iría a los juegos

Tsukasa: Tal vez fue a pasear por su cuenta ¿no crees? –Tsugumi se encogió en hombros y se acomodó de nuevo-

Tsugumi: No importa entonces, igual, es muy seguro que dijera eso con lo egoísta que es

Tsukasa: Oh vamos no digas esas cosas, estás enfadada con él pero dale un poco de tiempo –tratando de sonreírle-

Tsugumi: Eres muy condescendiente, hasta que ese egoísta no la trate bien yo no cambiaré de opinión –ella se cruzó de brazos y su prima dió un pesado suspiro mientras reía-

Tsukasa: Estaremos solas por un rato y tengo sed así que iré por un jugo ¿quieres que te traiga algo? –Dijo levantándose de la silla y acomodando un poco su vestido-

Tsugumi: Eh…si, de mango por favor –respondió distraída, su prima le sonrió y se fue camino al puesto de bebidas; ella la miró alejarse y después se dejo caer pesadamente sobre la tumbona, era aún muy temprano pero se sentía agotada, agotada de todo lo que la rodeaba-

 Algo lejos de allí Ren pagaba tres cartones de leche, y con una pajilla abrió uno de ellos; salió de la tienda y miró como a lo lejos sus amigos se divertían en los toboganes, en su opinión, parecían un grupo de animales salvajes pero muy para sus adentros sabía que la estaban pasando muy bien, notó como Tsubasa se reía a carcajadas mientras bajaba uno de los toboganes montada en un salvavidas acompañada de Hao, cerró los ojos y sonrió para sí, por alguna razón quería sonreír pero a la vez no le agradaba la compañía que tenía, en ese momento alguien interrumpió sus pensamientos.

Tsukasa: Con que estabas aquí –comento la joven sonriéndole haciendo que Ren se volteara a verla- pensé que estabas paseando por el lugar

Ren: No sería mala idea pero por ahora solo quería tomar un refrigerio –le contestó mientras la observaba detenidamente, eran el mismo caso que Yoh y Hao, le parecía increíble como a pesar de que físicamente eran exactamente iguales eran a la vez dos personas completamente opuestas, no son lo mismo- “aunque la vea sencillamente no siento nada por ella, a pesar de que sean iguales físicamente hay algo en ella que no me descontrola” –pensó para sí el joven-

Tsukasa: ¿Sucede algo malo? –pregunto curiosa, el chico negó; Tsukasa apoyó su mentón sobre sus dedos, necesitaba hablar con Ren y no podía perder esta oportunidad ya que tanto Tsubasa como Horohoro estaban en otros asuntos, así podría hablar con él con más calma-…em…Ren –dijo levantando un poco su mano con algo de timidez- ¿podrías esperarme un momento aquí? Será rápido, necesito discutir un asunto contigo –el asintió y ella se inclinó un poco para después entrar a buscar los jugos; al momento salió con una pequeña bolsa con tres jugos, uno de mango y dos de manzana consiguiéndose con un Ren un poco confundido-

Ren: ¿Cuál es el problema?

Tsukasa: Lo que sucede…es que quiero hablar contigo sobre Tsubasa –ambos se sentaron tranquilamente en un pequeño muro de piedras que estaba cerca de la tienda y Ren cruzó los brazos- solo…quería asegurarme que estás con ella por qué en verdad la aprecias

Ren: Supongo que lo preguntas ya que le dije que no podíamos comentar que estamos juntos ¿no es así?

Tsukasa: Te equivocas –sonriéndole tranquila- en mi opinión, eso no es necesariamente el problema, supongo que tomando en cuenta tu posición creo que ella debió haberlo esperado pero, con el tiempo se que le afectará. Tal vez para ti sea sencillo guardar un secreto así pero, Tsubasa…es alguien a quien podría afectarle sentimentalmente esta situación, ella no se quejará, en serio, te lo puedo asegurar, por eso prefiero conversarlo contigo antes que eso suceda, lamento entrometerme en tus asuntos pero debes entender que ella es mi hermana y debo cuidarla

Ren: Entiendo lo que me quieres decir y a decir verdad mi hermana me advirtió de la situación mucho antes pero no cambiaré mi opinión en cuanto a no revelar que estamos juntos; se que les causa alguna incomodidad pero no es nada de lo que deban preocuparse tanto tú como tus hermanas y mucho menos Tsubasa

Tsukasa: Entiendo –bajo un poco la cabeza, prácticamente no logro nada hablando con él, en eso, escucho como se aclaraba la garganta y ella levanto la mirada-

Ren: No me gusta perder el tiempo y sí estoy con tu hermana es porque simplemente en este momento quiero estarlo –volteó la mirada avergonzado- por eso te digo que no deben preocuparse, además piénsalo bien, a ella le gustaba escaparse sola y rondar por ahí, ella ahora se controla y me pide a mí que la acompañe, supongamos que no querría estar con ella pero igual le conviene porque estará acompañada de alguien fuerte y así no la atacarán

Tsukasa: Si pero –lo miró un momento, debía pensar bien antes de responderle; respiró profundamente y dijo- mi hermana te quiere mucho, no quiero que por eso en algún momento termine lastimada, sí tu también la quieres, debes defenderla mas allá de los ataques sorpresa que dan los Ryugasaki… también debes protegerla de que algo le pase interiormente, ella es una persona delicada y por eso solo te pido el favor de que la cuides muy bien, se que algunas veces puede llegar a ser molesta pero es la manera en que ella demuestra su aprecio

Ren: Se a lo que te refie—

 ¿Este caballero te está molestando Tsuki?

Tsukasa: ¡T-Tsugumi! –ambos voltearon sorprendidos al ver a la rubia frente a ellos de brazos cruzados, no le daba una bonita mirada a Ren quien la sintió algo incomoda-

Tsugumi: Note que te tardaste en regresar así que pensé venir a buscarte yo misma, pero para sorpresa mía consigo que estás hablando con él –señalando a Ren-

Ren: ¿Por qué esa clase de actitud? Yo no soy Hao ni te he hecho nada malo Tsugumi –mirándola con el ceño fruncido-

Tsugumi: Por supuesto que sí –colocando sus manos en su cintura- escuche de que iba la conversación y así tengo la oportunidad de comentártelo –acercándose a él con el ceño fruncido teniendo un pequeño duelo de miradas con él- he notado como has tratado a Tsubasa en estos días y debo comentar que no me agrada tu actitud

Ren: Le estaba comentando a tu prima que no deben preocuparse por---

Tsugumi: Si debo –en eso le pico el pecho con su dedo índice- escucha, Baba puede ignorar todo lo que le decimos así que te lo diré a ti; trátala como se debe o te lo aseguro que tú y yo tendremos serios problemas –Ren la miraba sorprendido mientras que a Tsukasa le salían muchas gotas en la nuca, no esperaba ver esa actitud en Tsugumi tan pronto ni tan repentinamente-  

Tsukasa: Tsugumi, creo que deberías calmarte un momento –moviendo un poco las manos para calmarla- ya estuve hablando con Ren y creo que, no deberíamos pensar mal de él ahora –Ren soltó un suspiro de alivio, al menos una de ellas apoya su punto-

Ren: Le comentaba a tu hermana que no debía preocuparse ya que estoy con ella porque q-quiero estarlo –al terminar la frase se aclaro la garganta, no le agradaba tener que decir ese tipo de cosas pero de alguna manera debía defenderse de ellas- se que te preocupa y sé lo que me espera sí llega a pasarle algo por mi culpa pero no le pasará nada así que les pido que dejen de preocuparse, además no creo que ustedes le hayan hecho lo mismo a Lyserg o a Horohoro –Tsugumi volteo la mirada pero se podía notar sus mejillas sonrojadas-

Tsukasa: Algo…parecido –dijo aclarándose la garganta mientras miraba a un lado con algunas gotas en la nuca-

--Flash Back

Tsugumi: Espero que no le pase nada malo a Tsukawa Lyserg –riéndose un poco mientras cruzaba los brazos-

Tsubasa: Sí le llega a pasar algo ten por seguro que no esperaremos mucho tiempo para desquitarnos contigo –apoyando fuertemente una mano sobre el hombro de Lyserg mientras reía-

Lyserg: Si, por supuesto, no deben preocuparse tanto por ella, les aseguro que la cuidare muy bien –riéndose un poco también, pobre joven inocente; en eso Tsukasa lo llamó picándole un hombro con un dedo-

Tsukasa: Te recomendaría que las tomes en cuenta porque lo que dice va muy enserio –tratando de sonreírle con algunas gotas en la nuca a lo que el chico le salió una gota gigante-

Lyserg: Si…lo tomare muy en cuenta –viendo como tanto Tsugumi como Tsubasa la miraba con unas sonrisas burlonas pero tras ellas parecieran tener un aura oscura-  

--Fin del Flash Back


--Flash Back

Tsubasa: Te lo dijimos ya bobo, espero que lo recuerdes bien –los tres estaban sentados en la mesa de la sala y tanto la rubia como ella le picaban con un dedo cada lado de su cabeza mientras sonreían divertidas-

Horohoro: Ya lo sé, ya lo sé, sí le hago algo ustedes me lo harán el doble –cruzado de brazos algo malhumorado-

Tsugumi: Cambiamos de opinión creo que por tu mala conducta te lo haremos el cuádruple –reía divertida mientras le seguía picando la cabeza-

Horohoro: ¡P-pero porque son tan crueles conmigo! ¡Yo las trato muy bien a las dos!

Tsubasa/Tsugumi: Simple, si le haces algo malo a Tsuki la vas a pagar bien caro –se encogieron en hombros mientras reían malvadamente entre ellas, Horohoro empezó a sudar frío al verlas, por un momento se arrepentía de haber tomado esa decisión-

--Fin del Flash Back

Tsugumi: Pero no lo hacemos solo para darte una charla de que debes de cuidarla, lo hacemos porque hemos visto que no la tratas bien por más que ella cumpla tus reglas –Tsukasa por su parte asintió lentamente-

Tsukasa: No queremos que salga lastimada es todo

Ren: Pero porque la defienden tanto si ella misma me lo reclamó anoche –ambas chicas quedaron paralizadas y abrieron sus ojos sorprendidas- ¿Cuál es el asombro? Con un carácter como el de ella era de esperarse que lo hiciera

Tsugumi: Momento, momento –acercándose rápidamente a él- nos estás diciendo que la misma Tsubasa se quejo de ti anoche –el chico volteo la mirada y cruzo los brazos-

Ren: Anoche tuvimos una pequeña charla por eso les digo que deben dejar de preocuparse y dejar todo en mis manos, yo sabré manejar este asunto

Tsukasa: Tsubasa…te reclamo a ti –dijo aun sorprendida-

Ren: ¿¡Pero cual es tanto asombro!? –viendo como ambas chicas aún lo miraban sorprendidas-

---

Tsubasa: Muy bien, ¿Cuál sigue? –Flexionando un brazo para apretar “sus músculos” con una mano; todos los que la rodeaban ya estaban mareados y empapados mientras ellas se reía divertida- oh vamos, no me digan que ya se cansaron

Hao: Nos hemos montado en todos y cada uno de los toboganes que hay, solo nos quedan las atracciones tranquilas y aquel –señalando un tobogán muy alto donde solo podía bajar una persona a la vez, era muy delgado y mucho más alto que los otros, se podría decir que es uno de los más extremos- no creo que alguien se quiera montar en eso aún

CLARO QUE SI ME QUIERO MONTAR

 Todos miraron curiosos como Horohoro y Tsubasa exclamaron al mismo tiempo apretando los puños emocionados, no se habían dirigido palabra en todo el día que no sean más allá de ‘hola’ ‘bobo’ y ‘mujer’, no tardaron en cruzar miradas, Tsubasa inflaba las mejillas y la veía con rencor mientras que Horohoro cruzo los brazos y la miraba con fastidio; muchos de los presentes podrían jurar ver pequeños rayos entre ellos.

Tsukawa: Porque no dejas que Horo onî-chan te acompañe onê-chan –le comentó mientras sonreía, ella desconocía el pequeño problema que había entre ellos- no creo que onî-chan tenga problemas ¿verdad? –le sonrío inocentemente a Horohoro mientras este la miraba algo perdido-

 Los presentes aguantaban la risa al ver como Horohoro no hallaba la manera de negársele a la joven y esta lo miraba atenta con una sonrisa, a Horohoro le salieron muchas gotas en la nuca pero después dio un pesado suspiro, le dio unos cuantos golpecitos en la cabeza a la chica y le trato de sonreír, ya era como tener otra hermana menor así que tratarla como Pilika no era tan difícil.

Horohoro: Claro que lo haré, se lo prometí a tu hermana –sonriéndole con muchas gotas en la nuca, esperar en esa fila será la tortura más larga que podrá tener en mucho tiempo-

Tsubasa: Espero que recuerdes que ella está lejos de aquí ahora sí te quieres montar muévete que no tengo todo el día –decía con una gran vena hinchada en su frente y estaba cruzada de brazos-

Horohoro: ¡Deja de tratarme así mujer! –Le reclamo mientras la señalaba con un dedo y lo rodeaban muchas venas hinchadas-

Tsubasa: ¡Deja de llamarme mujer! Al menos trátame con más respeto hombre de las nieves –juntaron frentes malhumorados mientras se les escuchaba a ambos un sonido parecido a ‘zzzeeeeeee’, sus bocas parecían un par de triángulos-

Tsukawa: Que extraño, los noto muy malhumorados, hace un momento estaban de muy buen humor –mirándolos a ambos mientras pestañeaba varias veces-
       
Lyserg: Digamos que últimamente tienes sus diferencias –comento con algunas gotas en la nuca-

Hao: Je, se podría decir eso –riéndose para sí-

Manta: Vayan entonces, nosotros los esperaremos abajo

Yoh: ¡Me cuentas que tal es Horohoro!

Horohoro: Yoh, No te puedes montar ahí con él ni--- -Tsubasa lo interrumpió mientras lo llevaba con ella jalándolo de un pequeño collar que tenía en el cuello de una figura ainu tallada en madera- oye-uh---

Tsubasa: Cállate y muévete bobo –y así todos vieron como Tsubasa arrastraba a Horohoro hasta la fila del tobogán, temían por la vida del sujeto-

Chocolove: Apuesto a que le golpeará el rostro antes de que lleguen a las escaleras –dijo riendo por lo bajo-

Yoh: Yo a que Horohoro le reclamará en cualquier momento –riendo divertido-

Lyserg: No creen que sea algo grosero apo—

Hao: Apuesto…a que le dará una patada en la entrepierna sí es que él llega a quejarse –apoyando su cabeza sobre una de sus manos-

Manta: No escuchan ni una sola palabra –mientras se encogía en hombros-

 Tal como Yoh dijo, apenas Tsubasa lo soltó el empezó a reclamarle a lo que ella lo miro de reojo y cruzó los brazos quejándose también duraron así hasta avanzar más la fila, en eso Horohoro le reclamó algo que hizo que Tsubasa hinchara sus mejillas enfadada y apretara sus puños a los lados de su cintura.

Chocolove: Va a explotar, va a explotar –cubriéndose la boca con una mano mientras intentaba no reírse-

Yoh: Te dije que iba a reclamarle –todos rieron por lo bajo mientras Hana y Tsukawa miraban con atención aun confundidos; en eso todos vieron como Tsubasa le pisó un pie a Horohoro y avanzó en la fila apretando los puños y alzando la cabeza, empezó a subir las escaleras mientras que Horohoro iba tras ella apretando un puño y lanzando maldiciones a su interior-

Chocolove: Ow rayos, jure que iba a golpearlo en el rostro

Hao: Ya será para otra ocasión –encogiéndose en hombros mientras reía un poco-

---

Horohoro: No fue mi culpa deja de tratarme con tanto odio, a cualquiera le pudo haber pasado y yo no estoy feliz del asunto –le reclamaba en voz baja ya que las personas de la fila se habían quejado por el escándalo hace un momento-

Tsubasa: Sí no fuera por Tsuki, ten por seguro que tu no tendrías cabeza para el día de hoy bobo, además eso te ganas por lo encimoso que eres con ella –susurrándole malhumorada mientras estaba cruzada de brazos- se la pasan todo el tiempo juntos, casi ni se sueltan y cuando ella lo hace no pasan ni cinco minutos cuando tú te quejas

Horohoro: Es mi novia y me gusta tratarla así porque ella es muy buena conmigo, seguro estas celosa porque el tarado de Ren no ha habido día que te trate bien, si, si, si eso es seguro –decía para molestarla mientras también se cruzaba de brazos-

Tsubasa: Pues para tu información Ren y yo nos llevamos bien ahora, además porque habría de estar celosa de ti, bobo hombres de las nieves -decía mientras mecía la cabeza y la cintura dando una pose malcriada-

Horohoro: Mujer loca, sí Tsuki no me lo hubiera pedido te hubiera dejado ¡sola! Para que te atrapen y ¡te lleven!

Tsubasa: ¿Ah sí? Apenas nos bajemos de aquí me asegurare de decirle a Tsuki todos tus planes

Horohoro: Chiquilla malcriada –frunciendo el ceño y volviendo a poner su boca como un triangulo mientras le lanzaba rayos a Tsubasa-

Tsubasa: Bobo sin cerebro –haciendo lo mismo que Horohoro, parecían hermanos, no era una pelea enserio hasta que les toco el turno para pasar, Tsubasa miró un momento al tobogán y después vio la altura de donde estaba y se hecho un poco para atrás mientras sonreía con una gran gota en la nuca-

Horohoro: Sí quieres que yo baje primero dímelo

Tsubasa: No, no, no para nada, yo puedo bajar, jaja jaja no es problema, solo veía la piscina a donde llegaremos jaja jaja –actuando para ocultar su miedo a lo que Horohoro negó con la cabeza y cruzo los brazos-

Horohoro: Iré yo primero y veras que no pasa nada, ya me he montado en uno de estos solo trata de no levantar la cabeza, debes permanecer derecha y quieta hasta llegar abajo –el encargado le dio permiso para empezar a acomodarse en el tobogán, Tsubasa iba a pasar primero pero después miró de reojo a Horohoro y le ofreció con una mano que pasara-

Tsubasa: Solo, no debo moverme ¿no es así? –cruzada de brazos mientras le volteaba la mirada malhumorada-

Horohoro: Sep, ¡te espero abajo, boba! –Tsubasa iba a reclamarle pero el muchacho se colocó sus manos en su pecho y bajo por el tobogán a máxima velocidad, se podían escuchar sus gritos de felicidad mientras bajaba-

Tsubasa: ¡¿Cómo qué boba?! Ese idiota me las va a pagar caro –reclamó apretando un puño y espero a que el encargado le diera la señal para poder montarse, la chica se sentó al comienzo del tobogán, respiro profundo y se colocó las manos en el pecho, se recostó y se dejo llevar por la presión de agua, cerró los ojos pero a empezar a sentir el vacío en el estomago solo podía lazar gritos, no tardo prácticamente nada en llegar a la piscina y traer con ella una gran ola de agua, al caer a la piscina se levanto rápidamente tosiendo un poco mientras reía y con su rostro cubierto por su flequillo, en eso sintió que alguien la jalaba del brazo mientras se reía a carcajadas-

Horohoro: JAJAJA ¡viste que no fue la gran cosa! Jajaja, eso sí que fue divertido pensé que iba a salir volando de esa cosa

Tsubasa: ¡Verdad! Va demasiado rápido es algo alucinante –quitándose el cabello de la cara y riéndose a carcajadas mientras a duras penas trataban de salir de la pequeña piscina a donde llegaron-

Horohoro: ¡A que no puedes montarte de nuevo gallina! –Mientras salía y trataba de correr para entrar de nuevo en la fila-

Tsubasa: ¡¿Quieres apostar Bobo?! –Tratando de seguirlo lo más rápido que podía- apuesto a que yo bajare más rápido que tú

Horohoro: No quiero que eso pase, sí bajas más rápido me matarás con tus gritos, parecías una pájaro agonizando –bromeando con ella-

Tsubasa: Tú cállate, desde arriba se podían escuchar tus alaridos –mientras le golpeaba un hombro de manera amigable-

Horohoro: No, no, no, puedo jurar que tus gritos atormentaron más

Tsubasa: Entonces en el próximo será quien no grite mientras baja –sonriendo divertida-

Horohoro: El que lo haga le pagara el almuerzo al otro –salpicándole agua de sus manos que aun estaban mojadas-

Tsubasa: Ya veras, te pediré el menú más completo del lugar –se reía a carcajadas mientras lo mojaba al sacudir un poco su cabello-

Horohoro: ¡Oh! Deja, ¡deja eso! –Decía divertido mientras la abrazaba por el cuello y le frotaba un puño en la cabeza- ¡eres una chiquilla malvada! Jajajaja

Tsubasa: Jajajaja ¡bobo! Eso duele –tratando de soltarse, sip, parecían hermanos y así fueron molestándose a lo largo de la fila mientras que sus amigos solo los observaban de lejos atónitos-

Chocolove: Debe ser algo que comemos por las mañanas –volteándose repentinamente después de ver tal cosa, todos fueron tras él con las mismas caras de asombro-

Yoh: Los viajes cambian a la gente ¿no lo creen?

Manta: Tienes razón –riéndose un poco- ¿está bien que nos vayamos ahora?

Hao: Creo que conociendo a los personajes, estarán allí hasta que no sientan el cerebro así que mejor nos adelantamos nosotros a comer, irán cuando les ruga el estomago

Tsukawa: Debo decirle a Tsukasa onê-sama, primera vez que veo a Tsubasa onê-chan tan amigable con Horo onî-chan –decía sorprendida-

---

Tsukasa: ¿Enserio? –interrumpiendo su lectura para ver a todos los presentes algo sorprendida, no había terminado de pasar un asombro cuando le mencionan otro-

Tsugumi: Ustedes deben estar bromeando –riendo para sí- eso es imposible

Chocolove: ¡No!, no, no, los vimos con nuestros propios ojos –todos voltearon a verlo un momento mientras guardaban silencio, en eso, el chico entendió la indirecta- ¡estaré ciego pero puedo ver gracias a Mic! ¡Ustedes se lo toman todo a lo literal! –Todos asintieron al mismo tiempo-

Tsukawa: ¡Es cierto onê-sama! –decía sorprendida-

Lyserg: Miren ahí vienen –señalando a los jóvenes que venían bromeando y empapados hasta las orejas, se podían escuchar sus risas a lo lejos y al llegar ambos fueron directo donde Tsukasa-

Tsubasa: Tsuki, Tsuki, debes venir con nosotros –picándole un brazo mientras sonreía divertida-

Horohoro: Si, sí, estoy seguro que algunos toboganes te gustaran, anda, sí quieres te montas conmigo pero debes venir –sonriéndole de oreja a oreja mientras la levantaba de su silla-

Tsukasa: V-veo que se están llevando…bien –comento algo insegura y al darle una mirada al grupo todos se encogieron en hombros a lo que ella volvió a mirar a su novio y a su hermana quienes la miraban emocionados- ¿se divirtieron mucho juntos? –Tratando de sonreírles con algunas gotas en la nuca-

Horohoro/Tsubasa: No me había divertido así en mucho tiempo con nadie jajajajaja –lo comentaron mientras ambos sonreían ampliamente y los rodeaban muchos brillos, en eso ambos reaccionaron y se miraron de reojo, sus rostros se volvieron de piedra y en un segundo empezaron a agitar los brazos para golpear al contrario- ¡aléjate! ¡Aléjate!

Horohoro: N-no es lo que quise decir, es decir, sí me hubiera montado contigo seguro la hubiera pasado muchísimo mejor –dijo rápidamente mientras le tomaba ambas manos a Tsukasa y la miraba nervioso-

Tsubasa: ¡Y yo estoy segura que si me hubiera montado con alguien más también! –Empujando a Horohoro a un lado mientras se guindaba de un hombro de su hermana- ¡no tuve opción! ¡Nadie más se quería montar conmigo Tsuki!

Horohoro: Yo cumplí con lo que me pediste, la cuide hasta que se cansó –arrimando a Tsubasa para que el pudiera quedar al frente de Tsukasa, esta dio un pesado suspiro y apoyo una mano en la cabeza de ambos-

Tsukasa: Lo sé, lo sé, relájense, ahora iremos a almorzar –sonriendo para sí, definitivamente ellos son muy parecidos, le daba mucha gracia como a pesar de que pasen un buen rato juntos ellos no querían admitir que podían ser buenos amigos-

Tsubasa: Reconozco esa mirada –mirando atentamente a su hermana, en eso exclamó sorprendida- ¿Qué estas pensando Tsuki? –Su hermana solo rió un poco mientras le tomaba la mano y llevaba su bolso-

Tsukasa: No te preocupes solo recordé algo gracioso –dándole una dulce sonrisa a su hermana mientras cubría parte de su boca- vamos, acompáñame al baño antes de ir a comer

Tsubasa: Tsuuuki, dime qué rayos estas pensando ¡me pones nerviosa! –le exclamo mientras caminaba con ella- oeeh no se vayan sin nosotras, no nos tardaremos –volteando para dirigirse a los chicos- vamos Gumi –la rubia había estado callada una largo rato, estaba distraída así que Tsubasa tuvo que llamarla de nuevo para que reaccionara, la castaña la tomo de una mano y la llevo con ella-

Tsukawa: ¿En dónde comeremos? –le preguntó sonriente a los chicos quienes se intercambiaron miradas pero de repente todos se dirigieron a mirar a la rubia-

Anna: Se me es indiferente –dijo despreocupada mientras cruzaba los brazos- tampoco tenemos demasiadas opciones

Yoh: Tengo antojo de fideos fritos –frotándose el estomago mientras sonreía y llevaba a Hana en sus hombros-

Manta: Ahora que lo dices yo también

Lyserg: Sí eso es lo que comeremos tendremos que ir al otro extremo del parque –caminando hasta al frente de un gran mapa del lugar- los lugares para comer están en la playa, por aquí solo están los de bebidas y dulces, recojamos las cosas

Ren: No hay necesidad –cruzado de brazos- a mitad de camino hay casilleros para los visitantes –señalando el mapa- dejemos las cosas allí y las recogemos cuando las necesitemos, será más cómodo así –dijo sin importancia-

Manta: Aprovechemos entonces –cada quien empezó a recoger sus cosas, no eran tantas, pero lo hacía ver que eran muchas por la cantidad de personas; al poco rato las gemelas y Tsugumi salieron del baño, Tsubasa se había secado y puesto algo de ropa encima-

Anna: Muévanse no tenemos todo el día

Tsubasa: Danos tiempo Anna, no todos estuvieron asoleándose –metiéndose las manos en los bolsillos de su sweater gris con capucha y sin mangas con el cierre abierto-

Anna: Tú fuiste la única que estuvo chapoteando por ahí la que debería de apresurarse eres tu –cruzándose de brazos mientras a ambas le salían algunas venas en la frente-    

Tsukawa: Onê-sama dejaremos las cosas en unos casilleros a mitad de camino –Sacando de él una camisa blanca holgada con el dibujo de unas tortugas para ponérsela; llevaba tiempo fuera del agua así que estaba seca gracias al sol- ¿dejaras algo afuera onê-sama? –Sacando la cabeza por el cuello de su camisa-

Tsukasa: Supongo que lo necesario –se encogió en hombros mientras en un pequeño bolso de mano metía un bloqueador y su teléfono- ¿quieres que te guarde algo? –la jovencita negó rápidamente después de haber tomado rápidamente dos ligas para el cabello para hacerse dos colitas bajas- en ese caso vámonos –sonriendo mientras iba a tomar su bolso pero Horohoro lo tomo primero y se lo llevo con el-

Tsubasa: Pero que caballeroso de tu parte Bobohoro, espero que tengas cuidado con el –cruzándose de brazos mientras le daba una sonrisa divertida al joven mientras todos empezaban a caminar-

Horohoro: Sigue así, sigue así, ya veremos quién te acompaña a jugar en los toboganes la próxima vez –la chica infló sus mejillas mientras que la pareja al frente de ella reía por lo bajo-

Tsubasa: Aprovechado –frunciendo el ceño aun con las mejillas infladas y tomando la mano de Tsugumi empezó a caminar- no importa, mas tarde iras conmigo ¿verdad Gumi? –La chica volteó a ver a la rubia pero esta dirigía su mirada a otra parte algo pérdida- ¿Qué te pasa? ¿Te sientes mal? –Mirándola un poco preocupada-

Tsugumi: ¿Ah? No, solo estoy algo cansada, tengo algo de sueño –estirándose un poco mientras le guiñaba un ojo, Tsubasa la observó un momento pero después volteó la mirada al frente, seguramente estaba imaginando cosas; por su parte Tsugumi respiró aliviada y siguió mirando a la misma dirección que antes. Miraba a Yoh, después de un rato volvió a dar un pequeño suspiro, debería de cambiar el panorama pero todos eran tan parecidos-

  La chica al bajar la mirada para ver a Tsubasa, pudo notar como miraba decaída a Ren y al ver a su gemela con su novio, se le inflaban las mejillas y le salían algunos humos de la cabeza; al mirar a sus otras hermanas solo podía ver cómo le sonreían a su pareja mientras iban tomados de manos, la mayor trataba de tomar su bolso algo avergonzada mientras que su novio se reía un poco de ella mientras alzaba el bolso y tomaba su mano para seguir caminando, la menor por su parte hablaba animosamente con su pareja solo que la notaba mas sonrojada que de costumbre; lo que pudo pensar es que iba a ser un día largo.
      
Lyserg: Resulto ser que el asesino fue el padrastro quien no quería tener hijos de otra persona –comento el joven al grupo ya cuando estaban sentados en la mesa esperando a que trajeran la comida-

Manta: Por supuesto, al estar viviendo en la misma casa y hacerse pasar por inocente no daría ninguna clase de sospechas –golpeando un puño sobre su mano-

Tsukasa: No, el sujeto tenía antecedentes, de haber dado los vecinos de la casa contigua los testimonios lo antes posible, los policías hubieran sabido que el padrastro golpeaba a los niños, es un típico caso de violencia domestica –alzando un índice mientras sonreía-

Lyserg: Esconder la evidencia en el sótano también fue una gran falla, solo hay que ser buen observador –tanto Manta como Tsukasa asintieron sonrientes para que después los tres rieran entre sí-

Tsubasa: Que…interesante…–cruzada de brazos con algo de fastidio-

Horohoro: ¿Cuándo traerán la comida? –Se quejó con su cabeza apoyada en una mano-

Ren: No debería tardar tanto –apoyando su mentón sobre una de sus manos empezándose a enfadar, llevaban ya mucho tiempo esperando la comida pero nada que llegaba-

Yoh: Tranquilos, pronto llegará, hay mucha gente, seguro que tienen muchos platos que hacer –riendo un poco pero en eso sintió que alguien le jalaba una mano-

Hana: Tengo mucha hambre papá

Yoh: Tranquilo Hana la comida llegará pronto –sonriéndole mientras le desordenaba el cabello pero el puchero del pequeño hizo que a todos les salieran una gran gota en la nuca, estaba enfadado-

Hao: Hasta el mocoso se queja –recostándose un poco en su silla mientras se abrazaba el estomago, no lo quería admitir pero ya llevaba dos o tres veces que le sonaba-

Manta: No debimos desayunar tan temprano y comer tan tarde –dijo observando su reloj de pulsera, marcaban a las 2 con treinta, ellos habían desayunado entre las ocho y ocho con treinta; ya era hora de comer, todos dieron un pesado suspiro mientras apoyaban sus cabezas sobre sus manos y guardaban completo silencio-

Chocolove: Porque tengo el presentimiento… de que olvidamos algo…-todos hicieron una pose pensativa y siguieron callados por un rato-

Tsubasa: No puedo ni pensar, no tengo energía –quejándose mientras golpeaba su cabeza contra la mesa- necesito alimento, necesito comer…–se le escuchaba mientras lloraba cascadas por los ojos-

Tsukasa: Cuando dijiste que gastaría energía en realidad si lo hizo Tsugumi –suspirando- mejor de lo que esperábamos –apoyando su cabeza sobre ambas manos mientras inflaba sus mejillas, cansada-

Tsugumi: Maldigo a mis poderes psíquicos –ambas suspiraron mientras juntaban cabezas, la rubia estaba cómoda de nuevo, sentada entre sus dos hermanas y charlando con ellas, pero no sabía que dentro de poco se acabaría la comodidad…de nuevo-  

Mesero: ¡Sentimos la tardanza por favor disfruten de su comida! –Dijo el joven dando una reverencia para después empezar a servir todos los platos-

 Todos suspiraron aliviados al ver como frente a ellos tenían su ansiado plato, no tardaron mucho en terminar de comer, cada quien vació por completo su plato y pagaron la cuenta ya con el estomago lleno y feliz, se notaba a más de uno con una sonrisa en el rostro, la espera valió la pena; Al salir del establecimiento notaron un estanque con peces cerca de la entrada, estaban tan hambrientos antes que ni lo notaron, Hana volteó a verlo interesado, quería ver los peces pero los mayores estaban hablando, el pequeño inflo sus mejillas enfadado, quería ir.

Tsukawa: Hana-kun ¿quieres ir a ver el estanque conmigo? –Dijo la jovencita al arrodillarse al lado del pequeño-

Hana: ¡Sí! ¿Puedo? ¿Puedo? –Jalando la mano de Yoh-

Yoh: Si, pero no te alejes de Tsukawa –el niño asintió y tomó la mano de la chica, ambos caminaron rápido al estanque y se arrodillaron a ver los peces-

Hana: ¡Ko! –Señalando a un hermoso pez blanco con manchas rojas-

Tsukawa: No Hana, ese pez se llama Koi –le comento sonriente-

Hana: ¡Koi! –Exclamó sonriente para volver a señalar el pez-
      
Tsubasa: Wah, son muy bonitos –comento la chica al llegar con ellos y arrodillarse para ver los peces-

Hana: Baba nê-chan se llaman Koi, ¡Koi! –señalándolos feliz-
 
Tsubasa: Muy bien Hana, lo recordaste

Hana: ¡Sí!, soy muy inteligente –Alzando la nariz orgulloso mientras cruzaba los brazos, Tsukawa se cubrió la boca al reír, era mejor no decir que lo ayudó, era más divertido así-

Tsubasa: ¡Ah! Hana, Hana –llamando al niño quien volteó a verla interesado- ¿Dime Qué soy? ¿Qué soy? –Dijo para después tomar una bocanada de aire para inflar sus mejillas y coloco sus manos arriba y debajo de su cabeza para moverlas como aletas de pez-

Hana: ¡Ah! Ah, ¿pez? ¡Pez! –Tsubasa asintió pero siguió haciendo la mímica, Hana la miro extraño y volteó a ver a Tsukawa quien le sonrió-

Tsukawa: Tal vez onê-chan quiere que le digas que tipo de pez es –Tsubasa asintió divertida-

Hana: Pero todos los peces son peces Koi –miró extrañado a Tsubasa, esta ya no aguanto más y abrió la boca para poder respirar-

Tsubasa: No, no, hay otros peces que se llaman diferente no todos son Koi –alzando un dedo mientras reía divertida- vamos, te daré otra pista, lo vimos en el hotel

Hana: ¡Pero habían muchos! y estaban esas cosas rojas con antenas –moviendo las manos simulando tener antenas y dando una mala cara ya que al parecer no le agradaron- y tenían los ojos afuera y-y se movían

Tsukawa: Esos no son peces Hana, esos se llaman langostas –sonriéndole-

Tsubasa: Vamos, tu lo recuerdas –inflando de nuevo sus mejillas y moviendo sus manos-

Hana: Eh…eh –en eso miró sorprendido a Tsubasa y la señalo-…fu… ¡FUKU!

Tsubasa: Incorrecto –sonriendo mientras hacia una equis con sus brazos- Es Fugu

Tsukawa: Fuku es lo que te pones –levantando un poco los hombros de su camisa- y Fugu es lo que comes –levantando su índice divertida-

Hana: Pero me dijeron que el pez globo era peligroso –inflando sus mejillas y cruzándose de brazos- Baba nê-chan mentirosa

Tsubasa: No, el Fugu se puede comer pero solo los más fuertes pueden preparar ¡el peligroso Fugu! –Apretando un puño y hablándole como si se tratara de un hecho heroico- es tan, tan, TAN peligroso que solo los maestros pueden prepararlo porque tiene veneno por todas partes –mientras más hablaba la chica, el niño la miraba mas y mas sorprendido-

Hana: ¡Ah! ¿Y sí te lo comes? –Exclamo el pequeño-

Tsubasa: Te paralizas –mirándolo con los ojos muy abiertos- se dice que se te paraliza el cuerpo y después no puedes respirar mas y ¡PUFF!

Hana: ¿puff?

Tsubasa: Aja, puff –menciono con una sonrisa despreocupada al momento en que Ren-ren le apareció en sus manos- por eso es muy peligroso Hana –riendo divertida al ver como el niño sudaba frio- pero ¿te digo un secreto? –colocando una mano al lado de su boca mientras le guiñaba un ojo, el niño asintió rápidamente mientras que Tsukawa reía divertida, era increíble ver como su hermana se divertida con el pequeño-

Hana: Dime, dime

Tsubasa: Yo he comido Fugu antes –alzando su dedo índice-

Hana: ¿¡Enserio!? –La chica asintió- ¿Y a qué sabe? ¿Por qué no moriste? ¿Sabía feo verdad? –la jovencita negó mientras movía su dedo de un lado al otro-

Tsubasa: Sabia delicioso, fue todo un festín –guiñando un ojo mientras alzaba un pulgar- te sientes poderoso

Hana: ¡Ah! ¡Yo también quiero comer Fugu!  

Tsubasa: Cuando seas fuerte prometo llevarte a comer Fugu conmigo

Hana: ¿Y podremos ir con mi papi y mi mami?

Tsubasa: Con todos los que quieras, eso sí, sí es débil no, no, no –moviendo su dedo índice de un lado al otro mientras colocaba su otra mano en su cintura-

Hana: ¡Claro! –Asintió decidido mientras apretaba sus pequeños puños-

Anna: Ahora querrá comer Fugu por culpa de ella –cruzándose de brazos mientras veía como las Ryugasaki jugaban con su hijo-

Yoh: Apuesto que se le olvidará en un rato –sonriendo divertido- además solo están jugando con el

Tsugumi: Y pensar que se divierte tanto con el niño

Tsukasa: Se gastan energías mutuamente –ambas rieron entre sí, sabían que Tsubasa era una niña pequeña en el fondo-

Tsubasa: ¡Oh! ¡Una foto Hana! –Agachándose al altura del pequeño-

Hana: ¡Sí! Foto, ¡foto! –el niño alzo un puño emocionado y ambos fueron corriendo donde Tsugumi-

Tsubasa: ¡Tómanos una foto Gumi! –Dijo mientras cargaba a Hana en un brazo-

Hana: ¡Foto Gumi nê-chan! –Ambos le sonrieron ampliamente a la rubia, ella los miró un momento en silencio pero después sonrió un poco para sí y saco la cámara-

Tsugumi: Hai, acomódense –enfocándole la cámara a ambos- hai cheeessu

Tsubasa/Hana: ¡Fugu! –Ambos inflaron sus mejillas, divertido Hana coloco una mano sobre su cabeza y la otra bajo su mentón mientras que Tsubasa solo coloco una sobre su cabeza ya que cargaba a Hana con la otra; la foto salió graciosa, sería un bonito recuerdo pero en eso Hana empezó a bostezar-

Tsubasa: Boo, Hana tiene sueño porque ya es hora de su siesta –riéndose divertida mientras empezaban a caminar-        

Hana: No es…aaaaaugh…cierto –rascándose un ojo y acomodándose en el hombro de Tsubasa somnoliento- yo no tengo sueño

Tsubasa: Mentiroso, mentiroso, Hana es un mentiroso –tarareando mientras lo mecía un poco-

Hana: No lo…aaaugh…soy –se abrazó del cuello de la chica y en un abrir y cerrar de ojos ya estaba dormido-

Manta: Batimos un nuevo record, no se había dormido tan rápido en días –susurro divertido al ver al pequeño dormido en el hombro de la chica mientras esta lo mecía lentamente-

Chocolove: Los toboganes debieron cansarlo y acaba de comer, eso cansa a cualquier niño

Horohoro: Pss –dijo llamando a Tsukasa para susurrarle- no sabía que tu hermana tenía ese lado delicado –cubriéndose un lado de la boca mientras miraba de reojo a Tsubasa quien caminaba relajada y tarareaba una tonada mientras mecía a Hana-

Tsukasa: No todo el tiempo lo tiene –riéndose para sí- digamos que Hana le cayó muy bien

Horohoro: Si, pero es raro verla tan tranquila y suave –en eso ambos notaron como la chica los miraba por el rabillo del ojo con un aura oscura mientras seguía tarareando-…ya sabía yo que me daba mala espina –a ambos le salieron grandes gotas en la nuca y siguieron caminando mientras reían entre ellos-  

 Buscaron sus cosas en los casilleros y regresaron al lugar donde estaban, Tsugumi se ofreció a quedarse a cuidar del dormido de Hana mientras los demás iban a divertirse; algunos se extrañaron un poco y más cuando Tsubasa decidió quedarse, supusieron que también gasto bastantes energías.

Yoh: ¿Están seguras que se quieren quedar aquí? Anna y yo no tenemos problema en quedarnos con Hana, en serio

Tsugumi: No te preocupes Yoh –sonriéndole- estaremos bien aquí y no es molestia cuidar de Hana

Tsubasa: Vayan y diviértanse ustedes –dejando sus cosas sobre la toalla donde dormía Hana-

Yoh: Sí ustedes lo dicen de esa manera –aun mirándolas extrañado- volveremos al rato entonces, estaremos en la playa si sucede algo ¿está bien?

Tsubasa: No te preocupes Yoh, REN cuidara de nosotras –atrapando al chico antes de que se fuera caminando y sonriendo victoriosa lo arrastro hacia ella- así que pueden ir tranquilos

Tsukasa: De todas maneras tengan cuidado por favor –dijo la chica mientras Horohoro le tomaba una mano-

Horohoro: Están en buenas manos, sí Ren dejara que las lastimaran de verdad que sería una vergüenza para él –riendo divertido-  

Lyserg: Estoy de acuerdo –sonriendo mientras cruzaba los brazos-

Tsubasa: ¿Ya lo ven? Ahora vayan, vayan –moviendo sutilmente las manos ahuyentándolos- apuesto a que tienen cosas más importante que hacer –dándoles una picara sonrisa para después cubrirse mitad del rostro con una mano- jojojojo es tan divertido molestarlos –al notar como cada una de las parejas se sonrojaba-

Tsukasa: Eres incorregible –suspirando un poco para después alejarse con el joven Usui y así hicieron lo mismo los demás quienes se fueron por un camino de piedras que según los anuncios, los llevaba a la playa-

Tsubasa: Al fin, un poco de paz –sonriendo confiada mientras se colocaba las manos en la cintura, en eso escuchó como alguien se aclaraba la garganta detrás de ella a lo que volteó divertida- no te comportes así, sabes bien que es tu deber –riendo para sí y en eso entrecerró los ojos- además, creo que alguien comentó que debíamos vernos más temprano ¿no?

Ren: Tu manera de persuadir es algo que me impresiona algunas veces debo admitirlo –hablándole en un tono sarcástico mientras cruzaba los brazos-

Tsubasa: Lo siento Ren querido, pero había que inventar algo –encogiéndose en hombros mientras le daba una media sonrisa divertida al notar como el joven se sonrojaba y le daba una mala cara-

Tsugumi: Aun me pregunto cómo pueden estar juntos –viéndolos a ambos mientras se acostaba en la toalla-

Tsubasa: Misterios de la vida ¿no es así?, de seguro Ren me quería desde hace tiempo solo que era muy tonto para admitirlo –jalándole una mejilla al joven e inflando las de ella pero el chico se iba a quejar cuando ella le cubrió la boca- ¡ssh! El niño está durmiendo Ren –el joven vio de reojo a Hana quien aún seguía durmiendo y volteó los ojos con fastidio- sabes bien que es bromeando nada más, no te enfades por cosas así –dándole algunas palmadas en la mejilla- , , Tsugumi ¿nosotros podemos dar un paseo?

Tsugumi: Vayan tranquilos, diviértanse –dijo sonriendo pero sin importancia- y lo dije en plural Baba –guiñándole un ojo, pero a pesar de hablarle bromeando, aún se notaba algo decaída, estaba extraña-

Tsubasa: ¡Gracias Gumi! No tardaremos –jalando a Ren por el brazo quien se quejaba mientras que Tsubasa solo se reía de él mientras lo tiraba a la piscina apenas llegaron a la orilla-

Ren: PFF…TSUBASA –le gritó el joven apenas salió a la superficie, la chica solo siguió bromeando y se lanzó a la piscina- grrr…eres tan…

Tsubasa: Ah, ah, ah –saliendo y moviendo su dedo índice- te recomendaría que no te comportaras así Ren querido

Ren: ¿Ah sí? Veo que el día de hoy tú estás llena de confianza ¿no es así Tsubasa? –Dándole una sonrisa torcida-

Tsubasa: ¡Claro! –Cruzando los brazos mientras alzaba la nariz altivamente- no te conviene meterte con alguien que puede robarte un beso en público en cualquier momento

Ren: No te atreverías a hacer algo así –sonriéndole muy confiado-

Tsubasa: ¿Quieres apostar? –Sonriéndole confiada al chico, quien se colocó alerta y en guardia-

Ren: Sabes bien lo que sucederá si lo haces Tsubasa, ¿estás dispuesta a tomar ese riesgo por un simple juego? –ambos se miraron altivamente hasta que Tsubasa se fue acercando rápidamente al chico hasta rozarse las narices, Ren abrió los ojos sorprendido y Tsubasa le sonrió confiada-

Tsubasa: Ya deberías saber a estas alturas que no me gusta perder, además –alejándose para colocarse a un lado de él y cruzarse los brazos divertida- me resulta muy entretenido sorprenderte de vez en cuando JAJAJA –riéndose a carcajadas del muchacho quien se daba un masaje en la sien muy enfadado-

Ren: Eres…una mujer muy, muy altanera –le decía mientras le salían mas y mas venas en la frente-

Tsubasa: Y tu eres un niño mimado –jalándolo de ambas manos para acércalo a ella y sentarse en unos pequeños escalones que tenia la piscina en todas sus paredes donde podían estar sentados cómodamente- también orgulloso y muchas veces malhumorado –siguió la jovencita mientras lo sentaba a su lado- pero henos aquí soportándonos el uno al otro –sonriéndole divertida a lo que él dio un pesado suspiro- pero que respuesta tan tranquila de tu parte –riendo por lo bajo-

Ren: No tiene caso pelear contigo ya –recostándose mejor en la pared detrás de él con algo de mal humor-

Tsubasa: Sí fueras así siempre, todo sería más tranquilo –riéndose divertida mientras entrelazaba una de sus manos con la de el-

Ren: Como te encanta quejarte –dijo relajado- y yo soy tu primer blanco

Tsubasa: Lo siento pero alguien tenía que hacerlo aunque pensándolo bien –bostezando un momento- serías muy aburrido sí fueras así, eres más divertido como eres

Ren: No soy tu juguete –decía entrecerrando los ojos-

Tsubasa: Créeme, un novio es lo más cercano a uno –el joven refunfuño malhumorado pero la jovencita solo rió para sí y apoyo su cabeza en su hombro- deberíamos vernos más temprano

Ren: Te lo dije, pero no me hiciste caso, tú sigues ignorando todo lo que te digo

Tsubasa: Tú eres el que complica las cosas –el chico volvió a refunfuñar pero se quedaron callados por un momento, estaban muy cómodos para quejarse ahora, había que aprovechar esos ratos de paz que extrañamente tenían-

¡Ren! ¿Dónde estás?

 Ambos abrieron los ojos rápidamente y miraron en todas direcciones, jurarían haber visto como todos se habían ido, en eso sintieron que la voz estaba más cerca y se separaron rápidamente.

Yoh: ¿Estará en la piscina? –Dijo el chico quien lo llamaba, el joven de ojos dorados lo único que atino a hacer fue tomar por la cabeza a Tsubasa e hundirla en el agua repentinamente, el chico alzó la cabeza y una mano para que el Asakura lo notara-

Ren: ¿Qué sucede Yoh? –Decía tratando de mantener la compostura mientras que su mano no permitía a la chica subir a la superficie-

Yoh: ¿Quieres ir con nosotros a la playa? ¡Hao y Chocolove quieren intentar windsurf!

Ren: No Yoh –mirando de reojo a la chica, la notaba aguantar la respiración lo mas que podía- no quiero ir a ver al estúpido de Hao como se cree el mejor en algo que seguramente acaba de aprender     

Yoh: Esta bien, lo que digas, volveremos en un rato

Ren: Si, como sea –alzando una mano y al ver a Yoh alejarse a donde estaba Anna, este soltó a la chica quien salió a la superficie dando una bocanada de aire, no había terminado de recuperarse cuando ya le tenía las manos en el cuello-

Tsubasa: ¿Pero qué demonios? –mirándolo enfadada mientras apretaba los dientes-   

Ren: Lo siento mucho pero es que iban a descubrirnos ¿no crees? –Imitándola con sarcasmo-

Tsubasa: Muy gracioso ca-ri-ño

Ren: Dos pueden jugar el mismo juego Ryu-ga-sa-ki, además me la debías

Tsubasa: Oh…con que ahora solo nos entendemos con deudas ¿no es así?

Ren: Claro, y tú me debes bastante ya

Tsubasa: ¡Debe esto! –con una gran vena en la frente lo tomo por los hombros y lo hundió en el agua de golpe-

Ren: YA BASTA ME CANSE DE TI –saliendo del agua y tomándola por debajo de sus brazos, la llevo hasta las escaleras de la piscina, sacándola cargada en brazos de muy mal humor; en eso notaron como algunos los miraban extrañados, a Tsubasa le salió una gran gota en su nuca al notar porque los miraban pero Ren se aclaro la garganta y tiró a Tsubasa en el suelo para solo decir indiferente- me estaba molestando así que decidí tomar medidas drásticas –cruzándose de brazos-

Yoh: Jiji deberías tratar de divertirte también Ren –riendo un poco; cuando se distrajeron Tsubasa volteo la mirada a Ren y cruzándose de brazos lo miró con una gran vena hinchada en la frente-

Tsubasa: Para la próxima…podrías ser un poco más evidente si lo prefieres, creo que no entendieron por que estábamos así –el chico la miró con una vena hinchada pero guardó silencio, ya se las cobraría-

Ren: ¿Y por qué volvieron Yoh?

Yoh: Oh, Anna y yo vinimos por unas cosas que olvidamos es todo y nos preguntábamos sí querías venir con nosotros

Hao: No se siente absolutamente nada por aquí, no tienes que estar con ellas si no quieres

Ren: ¿Lo dices para que vaya a practicar contigo windsurf? –El Asakura solo le sonrió altivamente- ya les dije que no me interesa la invitación y menos sí tú estás involucrado

Hao: Supongo que te gusta estar en un terreno seguro por ahora ¿no es así? O tal vez es otra cosa…pensé que un simple reto te interesaría

Tsubasa: ¿Windsurf? Hmm…creo que deberías aceptar el reto Ren –cruzándose de brazos y dando una sonrisa confiada; Ren la observó un momento un poco confuso pero esta le alzó un pulgar disimuladamente-

Hao: ¿Lo quieres intentar tú también? –cruzándose de brazos para mirar a la chica divertido-

Tsubasa: Tal vez, suena divertido en verdad –tomando su mentón con una mano- quería intentarlo desde hace un tiempo

Hao: Entonces ¿irán o no?

Tsubasa: Hmm… Tsugumi ¿vamos a la playa? –sonriéndole divertida-

Tsugumi: No tengo muchas ganas en realidad –decía recostada sobre la toalla con unos lentes de sol- si no hay nada por aquí vayan ustedes yo me quedare aquí tomando sol –levantando una mano y moviéndola de un lado al otro ‘ahuyentándolos’-

Tsubasa: Si te sigues bronceando parecerás una langosta –inflando sus mejillas y poniendo sus manos en la cintura- ¿segura que no quieres venir?

Tsugumi: Segura –dijo dando un pequeño bostezo- si voy a la playa me quedaré dormida, aquí estaré más entretenida –mintió señalando dos de los toboganes que se podían ver fácilmente desde el lugar, podía notar como las personas bajaban de él y caían sobre la piscina- vayan tranquilos, yo cuidaré de Hana

Tsubasa: Hai, hai, lo que digas –dijo resignada- prométeme que en el hotel haremos algo divertido las dos ¿entendido?

Tsugumi: ¡Vete ya Baba!

Tsubasa: Me voy, ¡me voy! –exclamo para después sacarle la lengua con los puños apretados, Tsugumi le respondió de la misma manera a lo que ambas rieron un poco- ¡cuídate! –se despidió de ella con una mano mientras alcanzaba a los demás quienes habían empezado a caminar colocándose al lado de Ren y cruzando los brazos; Tsugumi observó por un momento a la pareja, estaban hablando, de seguro discutiendo ya que Ren la miraba malhumorado y ella le daba una sonrisa confiada, si ella estaba con ellos estaría segura, pensó la chica recostándose de nuevo y mirando a un lado de ella para ver al pequeño niño rubio dormir-

Tsugumi: Al menos está dormido –dijo sonriéndole algo triste- un poco de soledad no me caerá mal –lo que la chica no notó fue como el mayor de los Asakura estuvo mirándola extrañado hasta que la perdió de vista, para el chico ya estaba muy sospechosa-

Horohoro

Escuchó de repente el chico saliendo de sus pensamientos, notó como la chica que estaba a su lado le tomó el brazo y lo miró algo triste, sabía que le iba a preguntar pero no sabía exactamente como responderle, había tratado de evitar la conversación brindándole sonrisas falsas pero juzgando por esa cara, esta vez no recibiría bien una sonrisa poco convincente; el chico no tuvo de otra más que dar un pesado suspiro y detener el paso.

Tsukasa: ¿Qué sucede? …estás muy extraño desde ayer ¿puedo saber qué te tiene tan molesto?

Horohoro: ¿Molesto? Yo no estoy molesto –respondiéndole tratando de escucharse inocente a lo que la joven asintió frunciendo un poco el ceño-

Tsukasa: Sí lo estás pero no quieres decirme, por qué –soltándole el brazo y colocándose al frente de él- sabes que puedes decirme y trataré de ayudarte, sí algo te preocupa puedo ayudarte a solucionarlo, pero no puedo ayudarte sí no me dices que tienes…–dando un pequeño suspiró al notar como el chico le dirigió la mirada a otra dirección- tú no eres así normalmente…no me mientas

Horohoro: Pero sí no me sucede nada, estas preocupándote de más Tsuki –sonriéndole forzadamente y adelantando la caminata- el que llegue de último a los salvavidas es un huevo podrido –rió para sí para seguir caminando pero en eso sintió como alguien le tomaba una mano, al comienzo un poco suave pero después notó como le apretaba un poco, no lo iba a soltar, al voltear la mirada pudo notar cómo Tsukasa lo miraba algo triste pero decidida, lo sabía, no podía esconderle por mucho tiempo la verdad; el joven soltó un suspiro resignado y la atrajo un poco hacia él desordenándole un poco el cabello- Tsukawa no es la única que no te puede mentir, ven, podremos hablar con calma a dónde iremos –llevándola con él-

 La jovencita permaneció callada todo el camino, tomada de la mano del chico pero sin dirigirle la mirada, ella solo observaba al frente un poco seria, si daba su brazo a torcer seguro no se lo diría, debía permanecer fuerte. Llegaron a la atracción a la que se refería Horohoro, no había mucha fila ya que era una atracción tranquila y mayormente para parejas, ambos observaron como la pareja frente a ellos tomaba un salvavidas algo grande y se deslizaban por una rampilla para caer a un pequeño canal de agua en donde se dejaban llevar por la corriente, ya lo habían visto antes; el paseo consistía en dejarte llevar por la corriente por ese pequeño canal que bordeaba el parque, sencillamente para descansar de todas las demás atracciones extremas.

 Llegado su turno eligieron un salvavidas grande y se acomodaron sobre él al comienzo de la rampa. Esperaron a que el encargado les diera el aviso para deslizarse; después de ayudar a una pareja que llegaba del recorrido, el encargado les dio un pequeño empujón haciendo que el salvavidas se deslizara por la rampilla. Al caer el agua estaba un poco inestable, cosa que hizo que Tsukasa se abrazara un poco a Horohoro; ambos trataron de quedarse quietos hasta que el salvavidas tomó buen curso. Ya tranquilos la joven notó como tomaba a su pareja así que lo soltó y juntó ambas manos sobre sus muslos evitando su mirada y escondiendo sus mejillas sonrojadas; el chico notando su actitud volvió a dar un pesado suspiro y se recostó mejor en el salvavidas.

Horohoro: Ahora no me vas a dirigir la palabra –esperó una respuesta que nunca llegó así que pasó un brazo por los hombros de la chica y la atrajo hacia él-…no te enfades Tsuki, sabes que no lo hago con mala intención –la chica a pesar de su nerviosismo pudo voltear el rostro dándole a entender que este no sería un trabajo fácil-…uff escucha, lo siento ¿está bien?, es solo que…me molesta mucho tu actitud –la chica volteó sorprendida a lo que el peliazul se apresuro a decir-…n-n-no es lo que piensas, es decir…ugh –se rascó la cabeza confundido, no sabía cómo explicarse bien además debía admitir que la cercanía de la chica lo ponía algo nervioso. Notó como ella volvió a voltear la mirada pero ahora un poco triste-…escucha Tsuki, lo que sucede es que…me molesta que después de todo lo que ha pasado, planean regresar a Osaka, ¡están más seguras aquí! Sí se van pueden matarlas más fácil…yo también me preocupo por ustedes –la jovencita lo miró por el rabillo del ojo un poco sonrojada, él debía convencerla de alguna manera, tomó un poco de valor y se acercó a su rostro para sonreírle-…me preocupo por lo que te pueda pasar, sí te vas a Osaka no podré cuidarte como se debe –ella poco a poco volteó su rostro para mirarlo pero bajó la mirada por la cercanía, Horohoro se volvió a recostar sobre el salvavidas y sintió como ella recostaba su cabeza sobre su hombro en silencio; había ganado la partida esta vez-

Tsukasa: Se…que es molesto, pero, debo irme…no quiero, en verdad desearía quedarme todo el tiempo del mundo en Tokyo, pero mi deber es regresar a Osaka, el abuelo Kamaji nos necesita pronto allá, Tsukawa debe volver a sus estudios y…no queremos ser una carga para ustedes –respondió melancólica y escondió un poco su rostro al notar cómo el Ainu fruncía el ceño- se que puede frustrarte un poco pero debes entenderme, no puedo ser egoísta y solo pensar en mi bienestar

Horohoro: ¿Por qué siempre pones a los demás sobre ti? –Comentó un poco enfadado- ¿Egoísta? ¡Tú nunca eres egoísta! Tú también mereces disfrutar un poco las cosas –levantándola por los hombros para mirarse cara a cara- quiero que disfrutes y te diviertas pero es difícil por tu insistencia en primero pensar en los demás, entiéndeme tu también

Tsukasa: Pero…-bajó la mirada- yo solo…yo solo trato de cumplir con mi deber

Horohoro: Tu deber es ser feliz y estar a salvo ¿Qué otra cosa deberías hacer? –La chica permaneció callada a lo que el chico suspiró cansado-…solo quiero estar contigo un poco más, no le veo nada de malo a eso

Tsukasa: ¡No tiene nada de malo! Yo también quiero pasar más tiempo contigo –Dijo alzando la mirada sorprendida pero después la volvió a bajar-…pero…tenemos muchos asuntos importantes que resolver en Osaka…hemos…estado evitando nuestras responsabilidades por mucho tiempo ya, sí seguimos evadiéndolas sé que habrán algunos problemas más adelante, no me agrada, en verdad odio esto y quiero estar muchísimo más tiempo aquí pero debes entender que esas clases de responsabilidades van primero

Horohoro: Entiendo –le sonrió decaído- aunque en parte te admiro –a lo que la chica lo miró, él le brindo una amplia sonrisa, se notaba que no estaba fingiendo- yo escapé de mis responsabilidades hace mucho, tú a pesar de todo, quieres seguir y volver a ellas, aún con la oportunidad de no tenerlas, eres algo terca pero responsable  

Tsukasa: Siento que mi terquedad te cause problemas –sonriéndole nerviosa-

Horohoro: Bah, te hace ver mucho más bonita –sin aviso, le robo un pequeño beso y después se recostó en el salvavidas riéndose divertido con un leve sonrojo en las mejillas- solo prométeme que podremos estar juntos mucho tiempo antes de que te vayas

Tsukasa: Si…claro –dijo completamente sonrojada mientras apretaba los puños sobre sus muslos, siempre hacía lo mismo, ella nunca se daba cuenta cuando lo iba a hacer, el joven la acercó a él y ella recostó su cabeza sobre su hombro aún muy avergonzada-

Horohoro: Disfrutemos del paseo y después ¡podremos ir a comer unos dulces antes de irnos! –Exclamó divertido mientras le daba un corto beso en la frente- debo de aprovechar antes de que te vayas, porque sé que después te extrañaré bastante –sonriendo divertido mientras que la chica sonreía para sí avergonzada-                 

Tsukasa: Podemos planear salir juntos en estos días, no creo que los demás se molesten por eso –comentó en una voz algo baja-

Horohoro: ¡Así se habla! –alzando un puño emocionado haciendo que el salvavidas se moviera bruscamente casi tumbándolos pero cuando el salvavidas se dejó de mover ambos rieron entre ellos, era muy cierto, debían disfrutar el tiempo que les quedaba ya que no sabían cuando se separarían…ni cuando se volverían a ver-

Tsubasa: ¡Jajajaja! ¡Esto es más divertido de lo que creía! –tratando de seguir a Hao y moviendo su vela para dirigirse, estaban los 4 mas allá de la playa cerca de una lancha que los guiaba en el recorrido; con solo caerse una vez le dio la oportunidad de entender que hacia mal, Tsubasa seguía de cerca a Hao, sí iba a quedar bien, debía aprender del supuesto genio en la carrera, un poco más atrás de ella venia Ren, un poco enfadado, a pesar de todo había podido dominar el Windsurf pero quien tenía problemas era Chocolove-

Chocolove: ¡Como lo hace! –Comentó el moreno mientras trataba de montarse de nuevo en su tabla-

Tsubasa: ¡Chocolove! ¿No has entendido que yo manejo él viento? –Exclamando divertida para que el joven la escuchara- podrán ser muy poderosos, pero están en mi territorio ahora jajajajaja –aprovechando una ola para pasa pasar a Hao quien la miró enfadado-

Hao: ¡Veo que te diviertes! –le comentó acercándose a ella, no iba a permitir bajo ninguna circunstancia volver a perder y menos contra alguien como ella-

Tsubasa: ¡Por supuesto que sí! Jajajaja nunca podría hacer esto en Osaka jajajaja –los tres chicos la miraron curiosos mientras ella se adelantaba y se reía para sí- ¡oeh Manta! ¿Cuánto nos falta? –Gritando a la lancha frente a ella donde se levantaba de uno de los asientos el joven enano-

Manta: El conductor me dijo que será un poco más adelante ¡tengan cuidado! La marea esta algo alta –colocando ambas manos a los lados de su rostro para que lo escuchara porque el sonido de las olas y el motor de la lancha opacaban su voz-

Tsubasa: ¡Escucharon señoritas! No se lastimen en el camino –Volteando divertida a lo que los tres chicos la vieron con el ceño fruncido haciendo que ella estallara de la risa divertida y siguiera navegando su tabla-

 El joven de ojos dorados la miraba enfadado pero suavizó un poco la vista a medida que navegaba, seguro que estaba así porque de verdad se estaba divirtiendo, saludaba a Hao cada vez que estaban cerca sacándole la lengua y haciéndole muecas; ayudaba a Chocolove cada vez que se caía aunque se reía de él, es como si no estuviera compitiendo del todo, que solo estaba allí con ellos por simple diversión, se resbalaba y salía a la superficie riendo, su actitud volvía a ser extraña para él ¿Por qué no entendía lo que pasaba? ¿Por qué no entendía que sentía en realidad? Aunque estuvieran juntos, el chico tenía sus dudas de vez en cuando, pero al estar con ella todas esas preocupaciones desaparecían, se olvidaba de las dudas y solo le seguía la corriente, tal vez estaba mal lo que hacía… o tal vez no.

 Pero no debía pensar en eso ahora, tenía una tarea pendiente, no muy agradable después de verla divertirse tanto, pero ella misma había ingeniado todo y no le había dado ninguna clase de señal para dejar todo atrás. Lo siguiente que pasó fue bastante rápido, ni el mismo tuvo mucho tiempo para pensar, pero todo salió acorde a lo planeado.

--Flash Back

Tsubasa: Tú solo debes tumbarme de la tabla y yo fingiré que me lastime un tobillo así que tendrás que llevarme a la enfermería porque tú tuviste la culpa

Ren: Porque siempre soy yo el que debe tener la culpa –cruzándose de brazos mientras la miraba por el rabillo del ojo malhumorado-

Tsubasa: Tú te irías por tu cuenta cojeando a la enfermería o ni siquiera irías –cruzando los brazos dándole una mirada altiva y sonriéndole, el chico tragó en seco y le salieron muchas gotas en la nuca, era verdad-

Ren: ¡Hm! Bien, como sea –volteando la mirada para esconder su sonrojada tez- y como esperas que sepa cuando tengo que tumbarte, es un recorrido algo largo

Tsubasa: Cuando lo prefieras, aunque allí –dijo señalando al un grupo de muchachos que practicaban windsurf quienes daban la vuelta para regresar a la orilla- se vería más creíble –colocando sus manos en la cintura- la excusa seria que ninguno de los dos supo dar la vuelta ya podrías ver como tumbarme ya en el mar

Ren: ¿En qué momento piensas todas esas cosas? –Mirándola de reojo con una gran gota en la nuca-

Tsubasa: Mientras caminabas malhumorado hasta acá –sonriéndole llena de confianza, en eso Chocolove, Manta y Hao regresaban del puesto de Windsurf con 4 tablas y un joven quien manejaría la lancha que los guiaría-

Hao: Nos toca después de ese grupo –señalando la playa- pero debemos prepararnos desde antes

Chocolove: Nos darán unas pequeñas clases ahora –dándole una tabla con vela- y después nos dejarán por nuestra cuenta, el instructor irá cerca de nosotros en una lancha con Manta por si acaso algo nos pasa –Hao y Ren se acomodaron unos salvavidas al pecho mientras que Tsubasa observaba la tabla, era fácil zafarse de ellas, después de colocarse su salvavidas alzó su vela inspeccionándola con cuidado-

Tsubasa: Perfecto –colocando sus manos en la cintura mientras sonreía confiada y le rodeaban algunos brillos, Ren la observó mientras el mismo se acomodaba, era extraña… muy extraña-  

--Fin del Flash Back

Chocolove: ¿Enserio estás bien? –todos estaban en la lancha viendo a la chica quien extendía una pierna, tenía el tobillo algo rojo y algunos raspones pero igual se recostaba en su asiento mientras les sonreía confiada-

Tsubasa: Claro que lo estoy, me he lastimado tantas veces que las caídas ya ni me afectan –al momento alzó su pierna izquierda que era la que estaba un poco hinchada y los miró con algo de fastidio- pero sí me incomoda un poco el tobillo cuando piso, hmm debería ponerme algo o Tsuki y Gumi me matarán cuando se enteren –sonriendo con algunas gotas en la nuca-

Manta: Cerca de los restaurantes esta la enfermería, no queda lejos de aquí, podríamos llevarte

Tsubasa: ¿Ustedes? ¿Llevarme? Para nada –todos la miraron extraño excepto Ren que cruzaba los brazos enfadado y Hao que la miraba con una sonrisa divertido- tú, si tú –señalando a Ren con un dedo mientras le daba una sonrisa altiva- tu tendrás que llevarme hasta la enfermería –cruzándose de brazos-

Ren: ¡Por qué tengo que hacerlo yo! –reclamándole-

Tsubasa: Tú me tiraste –señalándolo- TU me llevas a la enfermería –señalando la orilla, A Chocolove y a Manta le salieron algunas gotas en la nuca, esa chica tenía coraje para tratarlo así; al único que le hacía gracia la situación era Hao, eran tan evidentes-

Ren: Eres una molestia –mirándola con el ceño fruncido, para ser una simple actuación lo hacía bastante bien- ahora debo cargar contigo por tu torpeza –la jovencita se encogió en hombros, estaba disfrutando molestarlo aunque fueran actuaciones-

  Llegaron a la orilla y Ren no tuvo de otra más que cargarla en su espalda, se despidieron de Manta, Chocolove y Hao mientras ellos intentaban ir a otra atracción cerca de allí. Ya solos en el camino dieron un pequeño respiro, Ren iba caminando cerca de la orilla para mantener sus pies frescos mientras cargaba a Tsubasa en su espalda quien observaba los alrededores.

Tsubasa: ¿Crees que hayan sospechado demasiado? –apoyando sus manos en los hombros del chico para poder voltearse y mirar a los chicos que habían dejado atrás-

Ren: ¡Hm! Fuiste lo más creíble posible –comentó malhumorado- y ahora por una de tus locuras ahora SI estas lastimada, eres increíble mujer ¿Por qué siempre debo lidiar contigo cuando estas lastimada?

Tsubasa: Porque no tienes otra opción, es como yo debo lidiar con tu humor de perros –pellizcándole detrás del cuello- deja de quejarte, al menos todo funcionó tal y como lo planeamos

Ren: ¿Planeamos? ¡Planeamos! Fue tu loca idea, no mía

Tsubasa: ¡Al menos pienso en algo!

Ren: ¡Arg y que quieres que haga yo mujer! –Dijo quejándose, ambos empezaron a discutir mientras la chica le jalaba las mejillas y a él le crecía el tongari de su peinado, rodeados entre venas hinchadas no notaron como se acercaba otra pareja, una muy conocida-

Yoh: Jejeje, que hacen ustedes dos por aquí, pensé que estaban practicando windsurf con mi hermano y los demás –sonrió el chico mientras que la rubia solo los miraba cruzada de brazos, ambos se detuvieron en seco y miraron a Yoh un poco sorprendidos, no pensaron en realidad que ellos estaban cerca, por un momento se quedaron callados, a pesar de que tenia la perfecta excusa ninguno de los dos pudo modular palabra hasta que Ren se aclaró la garganta algo sonrojado pero con una gran vena hinchada en su frente-

Ren: Vamos a la enfermería

Yoh: ¿Qué sucedió? –Preguntó curioso mientras le salían muchos signos de interrogación-

Ren: Nada en realid---

Tsubasa: Tu amigo me tiró de la tabla mientras practicábamos y me lastimé un tobillo así que él es responsable de llevarme a la enfermería –interrumpiéndolo apoyando los codos sobre su cabeza y su cabeza sobre ambas manos mientras le daba una sonrisa despreocupada- el ególatra y compañía se quedaron en algunas de las actividades de la playa –señalando detrás de ella-

Yoh: Entonces no es nada malo –riendo un poco- sí sucede algo Anna y yo estaremos aquí en la playa, es mejor que se apresuren –dijo despidiéndose con una mano- que se mejore tu tobillo Tsubasa

Tsubasa: Gracias Yoh, no se vayan muy lejos –se despidió con una mano de la pareja con una sonrisa cómplice mientras se cubría su boca con una mano, al ya estar lo suficientemente lejos Ren se aclaró la garganta- ¿sucede algo? –dijo despreocupada-

Ren: Estas agotando…poco a poco…mi paciencia, ¿en serio era eso realmente necesario?

Tsubasa: Entiende querido, para que nos crean debemos odiarnos y yo debo tratarte como una basura humana –alzando un pulgar mientras le salían un brillo a su lado-

Ren: Despreciable –volteando su rostro que ahora estaba algo negro y solo se podían notar sus ojos dorados viéndola con algo de desprecio-

Tsubasa: Bien, muy bien, estás dentro del personaje –apoyando su mano varias veces en la cabeza del chico ignorando su mal humor-

Ren: ¡Deja de tratarme así se supone que ya estamos solos! –reclamándole enfadado-

Tsubasa: Si, ya estamos solos –apoyando su mentón sobre una de sus manos mientras reía divertida- pero créeme que me divierto

Ren: ¡QUE NO ES GRACIOSO DEMONIOS! –El chico ya había caído en la histeria pero la chica rió a carcajadas mientras le abraza el cuello-

Tsubasa: Esta bien, está bien, dejare los juegos –sonriendo divertida mientras recostaba su cabeza sobre la de Ren, causando que el joven se sonrojara, ahora que lo notaba, estaban muy cerca el uno del otro, que vergonzoso-

Ren: No te creo esas pamplinas –comentó aun un poco malhumorado pero sus mejillas lo delataban, tener a la chica tan cerca lo descontrolaba, debían llegar a ese lugar rápido-

Tsubasa: Boo, tu nunca estás de acuerdo conmigo –disfrutando del paseo y de poder tener a Ren tan cerca, caras diferentes de la moneda– jeje, que liso y suave –jugando con su cabello… ¡suficiente! esa fue la gota que derramó el vaso, el chico apresuró el paso hasta llegar a la enfermería, debía alejarse de ella lo antes posible, para su alivio los atendieron apenas llegaron- Eres muy brusco –comento con las manos en la cintura mientras estaba sentada a su lado y el revisaba la crema para el dolor que le dieron-

Ren: ¡Oh por supuesto que no! Estás exagerando –mirándola por el rabillo del ojo mientras le salían algunas venas en la frente-

Tsubasa: ¿Cómo qué no? Casi me lanzas aquí y me tiraste al suelo de piedras cerca de la piscina hace menos de media hora, ¡con intención! –Jalándole un poco una oreja- ahora que lo pienso bien esto es lo menos que deberías de hacer por mí –comenta inflando las mejillas-

Ren: Si, tal vez para la próxima su majestad querría que me inclinara ante usted y le besara la mano ¿no es así? –Comentó sarcásticamente mientras se inclinaba para untarle la crema en el tobillo-

Tsubasa: Eso sería tan dulce de tu parte querido pero ya que SU majestad no quiere que nadie sepa lo que sucede entre nosotros, deberíamos dejarlo para otra ocasión –decía siguiéndole el juego- por ahora solo quiero un pequeño masaje y tal vez, tal vez un beso en la mejilla no me caería nada mal –revisando sus uñas pero en eso Ren apretó donde masajeaba su tobillo, la chica chilló pero Ren volvió a masajearla como debía mientras sonreía victorioso-

Ren: ¿Oh si? Y porque no me lo robas, ¿eres buena en eso no? –Alzó el rostro para darle una mirada altiva a lo que noto su sonrisa, la chica planeaba algo…y era algo en su contra- demonios nunca te cansas

Tsubasa: Los robo porque tú eres muy antipático y no me das cariño, en cambio yo con lo mal que me tratas aún te tengo muy consentido, siempre tan malagradecido –simulando estar enfadada mientras cruzaba los brazos e inflaba sus mejillas, el chico le alzó el tobillo mientras lo señalaba- eso no cuenta tonto

Ren: Eres tan complicada e incansable –comentó mientras le enrollaba el vendaje- ¿crees que así podrás caminar? –la chica apoyo su pie en el suelo, no le dolía del todo pero al dar pequeños saltitos sí se quejó haciendo que Ren suspirara cansado- tampoco esperes correr con el tobillo así, vamos camina –ofreciéndole el brazo mientras le volteaba la mirada, la chica lo tomo sonriente mientras fueron a dejar las medicinas- ahora ¿Cuál es tu plan B? y por favor que no involucre nada fuera de lo normal –mientras se daba un masaje en la sien-

Tsubasa: ¡Quería ir a los toboganes contigo rayos! –Se quejo mientras salían de la enfermería- podríamos dar un paseo por los alrededores supongo

Ren: Factible, la mayoría está en la playa

Tsubasa: Entonces eso haremos –sonriendo mientras el chico aun no le dirigía la mirada, estaba muy sonrojado para hacerlo; en eso pasaron al lado de una pequeña heladería, se veía bastante bien y aun quedaban muchos sabores- ¡comamos un helado!

Ren: ¿Segura? –Mirándola de reojo-

Tsubasa: Claro, no es mala idea –alzando un índice mientras la miraba de reojo y lo jalaba por un hombro; estaban por entrar cuando notaron Tsukasa y Horohoro caminando hacía ellos, aunque no los habían visto, estaban hablando entre ellos; ambos miraron en todas direcciones y pudieron esconderse en unos arbustos detrás del puesto, se quedaron callados hasta que notaron como la pareja se alejaba en la dirección contraria- uff…eso estuvo cerca

Ren: Esto está empezando a molestarme –ambos estaban tomados de la mano mientras observaban paralizados los alrededores, habían tenido bastantes sorpresas por el día-

Tsubasa: Si pero piensa positivo, algunas veces es divertido escondernos de los demás –sonriendo divertida mientras sudaba frio-

Ren: Te gustan las cosas más extrañas –mirándola de reojo-

Tsubasa: Querido te estás diciendo extraño –comentó la chica divertida mientras simulaba estar sorprendida-

Ren: ¡Yo no lo soy, tu si lo eres! –Exclamo apretando un puño-

Tsubasa: Entonces es a ti a quien le gustan las cosas extrañas –alzando un índice divertida-

Ren: ¡Tampoco es eso! –dijo histérico-

Tsubasa: ¿Ah no? Entonces explica esto –levantando sus manos entrelazadas- a ver, espero tu respuesta –sonriendo altiva a lo que el chico volteó la mirada sonrojado-

Ren: E-eso es completamente diferente –Tsubasa se le quedo viendo con una sonrisa divertida a lo que el chico se sonrojo más- ¡deja eso! –la chica estalló en risas mientras se levantaba y lo llevaba con ella, el chico se cruzó de brazos malhumorado mientras Tsubasa tenía una de sus manos en un brazo, Ren no dijo nada mientras seguían caminando permaneció con los ojos cerrados y cruzado de brazos con las mejillas sonrojadas mientras Tsubasa se reía por lo bajo de vez en cuando mientras entraban a la heladería-

 Un poco más adelante de ellos iba la pareja que acaban de ver terminándose sus helados mientras iban tomados de la mano, sonreían entre sí, se notaba que ya no había ninguna clase de peleas entre ellos. Al terminar los helados, Tsukasa sacó de su pequeño bolso un mapa de atracciones, al subir la mirada noto como Horohoro reía por algunas personas que salpicaban mucha agua al bajar por los toboganes, la chica bajo la mirada algo nerviosa y pensativa, pero después la subió y jaló un poco el brazo de Horohoro.  

Tsukasa: E-eh ¿Podemos ir al acuario juntos mañana, c-como nuestra cita? –ambos se sonrojaron al momento de escuchar cita pero después Horohoro la miró con atención así que ella aprovechó-… es un sitio que en verdad quiero visitar p-pero…creo que los demás se aburrirán al ir, son solo muchos peces en un gran tanque, no hay mucho que ver pero me gustaría que tú me acompañaras para al menos no ir sola –bajando un poco la cabeza avergonzada-

Horohoro: ¿Enserio quieres ir a ese lugar? –Bajando un poco la cabeza para tratar de mirarle el rostro, ella asintió avergonzada-

Tsukasa: He visto muchas fotos, siempre me ha parecido un lugar hermoso pero nunca he tenido la oportunidad de venir aquí a visitarlo ¿te molestaría si mañana vamos a visitarlo como la cita que teníamos planeada?

Horohoro: Jajaja, para nada, será divertido si vamos los dos –riéndose un poco- ¿Qué te parece esto? –Tomando el mapa turístico que traía la chica en su otra mano y abriéndolo con ambas- vamos a Pineapple Park a probar todos esos platos con piña, después podríamos ir al Ocean Expo Park donde está el acuario; todo nos queda parcialmente cerca así que podríamos salir desde muy temprano para disfrutar todo y ambos quedamos felices ¿bien?

Tsukasa: ¿Seguro quieres ir a esos lugares? ¿No es solo porque yo lo dije verdad? –mirándolo poco convencida a lo que el chico volvió a sonreírle-

Horohoro: No, yo también quiero ir, además Ryu me dijo que en ese Pineapple Park te dan Habu Sake, ¡debo probarlo! –le comento emocionado-

Tsukasa:… ¿Habu? …Habu Sake… ¡oh!-en eso exclamo sorprendida- ¿¡para que querrías beber sake de una serpiente venenosa!?

Horohoro: Oh vamos Tsuki, muchos hombres lo han bebido ya, es la especialidad de los locales en Okinawa, ¡debo tomarlo! –Apretando un puño al momento de que un brillo le salió al lado de su rostro- dicen que es bueno para los hombres, nos aumenta la fuerza y la virilidad, vamos Tsuki, déjame tomarlo –jugando un poco con ella para convencerla-

Tsukasa: P-p-pero –la chica lo miro con el rostro un poco azul y muchas gotas en la nuca; recordaba haber visto alguna foto del Habu Sake, era un gran recipiente de vidrio con una enorme serpiente enrollada al fondo, dejaba ver sus colmillos y tenía los ojos verde manzana, era algo un poco grotesco y la vez aterrador-… ¿e-e-estás seguro que quieres tomar algo así? Tú no necesitas tal cosa para aumentar tú…-al momento, se aclaró un poco la garganta y se sonrojo un poco- fuerza y hombría…

Horohoro: Al menos déjame probarlo, por favor, no me pasara nada por culpa de un tonto Sake con una serpiente –sonriéndole divertido, enserio quería tomar aquella bebida extravagante a como diera lugar-

Tsukasa: Está bien –suspirando al escuchar un sonoro grito de victoria por parte de su novio- p-pero yo no veré ese frasco –sudando frío al recordar aquella imagen de nuevo-

Horohoro: No te preocupes –abrazándola por un hombro y con una voz gallarda alzó un pulgar- sí dejas que lo beba ya verás que seré mucho más fuerte y podré defenderte de cualquier mal, nadie podrá tocar ni un solo de tus cabellos y al que lo haga le destrozare el rostro –estallando en risa mientras la abrazaba un poco mas y seguían caminando-

Tsukasa: ¿Por qué tengo un mal presentimiento de todo esto? –Comentando mientras su ahoge se movía y le salían muchas gotas en la nuca, su rostro por su parte volvía a tener un tono azulado-

---

El pequeño rubio abrió poco a poco los ojos, aún estaba cansado así que con flojera se movió a un lado para conseguirse con la muchacha quien lo cuidaba, la chica estaba recostada a su lado mirando al cielo algo triste, descansaba sus manos sobre su estomago y de vez en cuando suspiraba; el pequeño se rascó un ojo y se sentó, no le gustaba ver así a Gumi nê-chan, quería saber que le pasaba.

Hana: Gumi nê-chan ¿te sientes mal? –dijo el pequeño mientras movía un poco su brazo para llamar su atención, después se acerco y se recostó cerca de ella mirándola preocupado- ¿te duele la barriguita? –La chica se sorprendió un poco pero después se sentó mientras le acariciaba el cabello al pequeño-

Tsugumi: Jeje, no, no me duele el estomago –brindándole una sonrisa un poco melancólica, el chico no muy convencido se acercó a ella y la miró al rostro-

Hana: ¿Y porque estas triste nê-chan? –La jovencita dio un pequeño suspiro mientras abrazaba sus piernas-

Tsugumi: No estoy triste, solo cansada Hana –dijo tratando de sonreírle- ¿dormiste bien?

Hana: ¡Mm!, muy bien –estirando sus bracitos- ¿Y donde están todos? –Mirando a los alrededores- ¿Dónde está mami y papi? –‘Ellos otra vez’ pensó la chica, pero le sonrió al pequeño-

Tsugumi: Ellos y los demás están en la playa ¿quieres ir con ellos? –El pequeño asintió así que la jovencita se levantó colocando las manos en su cintura- bien, entonces vamos con ellos ¿quieres ayudarme a recoger? –el niño asintió divertido mientras metía todo lo que encontraba en el bolso de Tsugumi, al terminar, la chica cargo su bolso y dobló la toalla donde estaban ambos acostados, Hana se ofreció para llevarla así que la chica la enrollo y se la dió- eres el encargado de llevar la toalla entonces

Hana: ¡HM! –Asintió divertido mientras alzaba la toalla enrollada- vamos Gumi nê-chan –jalándole un poco una de sus manos así que ambos empezaron a caminar, algunas personas los observaban curiosos, parecían una madre y su hijo además que con su cabello rubio llamaban suficiente la atención, la rubia no tardo en notarlo así que aceleró el paso, ¿Por qué las personas eran tan curiosas?, en realidad eran una molestia-

 No tardaron mucho en llegar a la playa en donde apenas tocaron la arena Hana empezó a correr divertido, al pequeño le encantaba la playa, este viaje era la primera vez que visitaba una así que cada vez que llegaban a la arena se emocionaba y hundía sus piecitos en ella. Aunque algunas veces quedaba estancado por sus sandalias, Tsugumi reía divertida mientras lo alzaba para que saliera de ese agujero y apenas lo soltaba el niño volvía a correr, aunque apenas se acercaba alguien desconocido el corría a sujetarle la mano a la rubia.

Tsugumi: Mucho mejor, debes de quedarte cerca de mí Hana, vamos a buscar a tus papas –dijo sonriéndole mientras el niño le asentía pero no tuvo oportunidad de decir otra palabra, apenas subió la mirada observo como a lo lejos estaba la pareja-

 Paseaban por la playa solos, de repente Yoh le tomó la mano a Anna para llevarla cerca de la costa, la chica algo malhumorada se dejo llevar por el muchacho y este saco una pequeña concha de entre la arena y se la mostró sonriente a la chica quien se le quedo viendo un momento, su esposo siempre era tan tonto, la chica tomo la pequeña concha mientras le volteaba la mirada, el joven solo sonrió para sí mientras volvía a la marcha sin soltarle su mano… era doloroso, era doloroso ver algo así en su posición, Tsugumi mordió su labio inferior, no podía soportarlo más, esa situación la tenía harta, ya estaba ahogada, pero incluso así, nadie debía saberlo, nadie debía notarlo y menos el pequeño a su lado, ella respiro profundo y con todo el esfuerzo que tenia se agacho a la altura del pequeño y le sonrió dulce.

Tsugumi: ¿Ves a tu papás por allá? –Señalando a la pareja con un dedo- Están dando un paseo los dos, ¿quieres ir con ellos? O los dejamos un rato más solos –mientras apoyaba sus manos en sus rodillas-

Hana: Hmm… quiero quedarme con Gumi nê-chan –observo a la pareja- papi me dijo que Gumi nê-chan no puede quedarse sola además no estás muy feliz así que yo te cuidare –golpeando un puño en su pecho, orgulloso de lo que acaba de decir-

Tsugumi: ¿Enserio? ¿El valiente Hana cuidara de mí? –El niño asintió mientras cruzaba los brazos- jajajaja me siento tan segura con Hana-kun cuidando de mi jajajajaja –abrazando al pequeño mientras reía, por un momento, solo por un momento, ese comentario la hizo sentir mejor-

Hana: Uh…uh Gumi nê-chan –comento el pequeño mientras trataba de soltarse de ella algo avergonzado-  

Tsugumi: ¿Qué sucede? –el niño la miro con las mejillas sonrojadas mientras aun trataba de zafarse a lo que Tsugumi le sonrió divertida, volvió a abrazarlo mientras la rodeaban algunos corazones- que adorable eres! jajajaja –dejó al pequeño niño en el suelo y le tomo la mano- vamos a pasear nosotros también –al empezar a caminar el pequeño niño señalo al frente mientras sonreía divertido-

Hana: ¡Mira nê-chan son mis tíos! ¿Puedo ir? –pregunto levantando la mirada a lo que la rubia asintió, el pequeño soltó su mano y corrió a donde se encontraban Chocolove, Manta y Hao, el pequeño rubio se detuvo al frente de Hao y el joven lo miró por un momento, se encogió en hombros y jalándolo por su camisa lo subió a sus hombros despreocupado- ¡funcionó!

Hao: Claro, pequeño tramposo –la rubia se les juntó y los saludó tranquila, Hao por su parte la observó un momento; seguía con esa extraña actitud, quien rayos la entiende-       

Manta: ¿No creen que deberíamos irnos? Ya se está haciendo tarde

Chocolove: Y dentro de poco cerraran el lugar

Hao: Díganle a todos que nos vamos y ya –encogiéndose en hombros mientras los miraba aburrido, la rubia no dio ni un comentario, solo miraba de reojo el mar, Manta por su parte cumplió con el deber de comunicarle a cada quien para reunirse en los casilleros donde habían dejado las cosas, al poco rato ya estaba el grupo completo aunque tardaron en ir al autobús porque no encontraban a Ryu-

Chocolove: Con que eso era lo que faltaba –comentaba el chico mientras subía al autobús riéndose por lo bajo-

Tsubasa: Eres cruel Chocolove –cubriéndose parte de la boca con una mano mientras se sentaba en su asiento al lado de Tsugumi-

Horohoro: Sí Chocolove es cruel entonces que quedará para ti –acomodando su bolso y el de su novia para después sentarse a su lado-

Tsubasa: Silencio hombre de las nieves, anda, ve y regresa a tu cueva quiero a mi hermana cautiva cuando anochezca –riéndose mientras le picaba con un dedo la frente-

Ren: Fu, fu, fu…cueva –dijo por lo bajo el chico mientras se sentaba de brazos cruzados al lado de la ventana junto a Chocolove-…esta mujer y sus ocurrencias –la chica se sentó de rodillas en su asiento para mirar hacia atrás y sacarle la lengua pero después rió por lo bajo y se acomodo-

Tsubasa: Se divierten, admítanlo de una vez –cruzándose de brazos mientras les daba una sonrisa altiva-

Manta: No hemos dicho lo contrario –del pequeño grupo se escucharon muchas risas mientras que el autobús empezaba su marcha-

 Eran los únicos que regresaban al Okinawa Marriott Resort & Spa así que tenían el pequeño autobús del hotel para ellos solos; estuvieron charlando casi todo el camino, algunas parejas hablaban entre sí, todos se divertían menos una persona, parecía invisible la joven rubia quien a pesar de estar callada se podía notar como algo malo rondaba su cabeza; sus ojos estaban clavados en la ventana, algunos podrían pensar que estaba disfrutando de buena música mientras observaba la costa, pero no era así, no disfrutaba en lo absoluto estar allí, quería salir, quería escapar de esa agonía. Sin embargo, una persona si se había percatado del asunto, tal vez no la persona más esperada aunque había que admitir que era buen observador, además de que podía sentir el estrés y desesperación que rodeaba a la chica. ¿Cómo los demás no se daban cuenta?, claro, él podía leer pensamientos pero aunque no los leyera, la chica ya era bastante evidente.

 Estaba acurrucada en la ventana cruzada de brazos y viendo al vacío. A él, muy adentro le irritaba el hecho que solo fuera él quien se diera cuenta de todo, es decir, ni siquiera sus hermanas lo habían notado; por supuesto, estaban distraídas cada quien por su cuenta, cada quien tenía que lidiar con sus problemas… el joven cruzó los brazos algo serio, debía averiguar que le sucedía. Notó como la chica de repente paso una rápida mirada por los asientos del autobús, como buscando cambiar de panorama pero no importaba hacía donde veía, todo la hacía incomodarse más, rodeada en parejas mientras ella volteaba su mirada de nuevo a la ventana, estaba harta; no la culpaba.

Detrás del joven se podía escuchar la conversación que tenían Lyserg y Tsukawa quienes sonreían ignorando lo que sucedía a su alrededor, muy relajados conversaban acerca de los sucesos del día.

Lyserg: He notado que has estado muy emocionada en estos últimos días, en verdad no pensé que te gustaran tanto ese tipo de cosas

Tsukawa: Es muy divertido además debo de aprovechar cada oportunidad que tengo ya que no se en realidad qué sucederá más adelante –dándole una sonrisa un poco triste- sí puedo aprovechar de pasarla tan bien ahora con ustedes, no me arrepentiré en el futuro por una flecha perdida –animándose un poco-

Lyserg: ¿Una flecha pérdida? –mirándola de reojo algo curioso-

Tsukawa: Hay tres cosas que nunca podrán recuperarse –dijo alzando su índice animada- la flecha lanzada, la palabra dicha y la oportunidad perdida; me lo dijo mi instructor de Kyûdô una vez

Lyserg: ¿Kyûdô? –le pregunto curioso a lo que la chica le asintió sonriente-

Tsukawa: Es el arte del tiro con arco o bien llamado el camino del arco, yo practico Kyûdô desde que era pequeña, Hirai-sama dijo que era bueno que tuviéramos alguna clase de disciplina desde temprana edad aparte de nuestro entrenamiento como Shaman y mis abuelos estuvieron totalmente de acuerdo, aunque en Kyûdô no aceptan que practiquen niños yo pude hacerlo por conocidos de Hirai-sama en los templos

Lyserg: ¿Qué tienen que ver los templos con lo que tú practicas?

Tsukawa: Comúnmente imparten los entrenamientos de Kyûdô en templos, muchos de los monjes o sacerdotisas saben Kyûdô y como Hirai-sama conoce a algunos permitieron que yo lo practicara aunque…-la chica bajo un poco la cabeza con las mejillas sonrojadas, el Ingles la observo un momento y le preguntó que qué le sucedía- e-es que había olvidado lo vergonzoso que era practicar Kyûdô cuando era niña, todos los estudiantes me observaban extraño por ser tan pequeña; era yo quien tenía el blanco más cerca para no lastimarme y un arco más pequeño por mi altura, a pesar de que mi sensei y Hirai-sama tuvieran mucha paciencia recuerdo que al comienzo no me agradaba ir a las practicas –comentaba mas sonrojada y con muchas gotas en la nuca-

Lyserg: Pero según lo que he visto eres muy buena, en cuanto a puntería se refiere me sorprendes en verdad –el joven se rió un poco al notar como Tsukawa lo miraba sorprendida con las mejillas sonrojadas pero después bajaba la cabeza rápidamente-

Tsukawa: Te agradezco mucho por tus cumplidos, siempre trato de mejorar mi puntería –dijo la chica mientras jugaba con sus dedos mientras sonreía para sí, pero al momento levanto la mirada sorprendida, como sí lo que acabara de decir estuviera muy mal- p-p-pero aun me falta mucho por aprender, debo llegar al Seisha seichu, aun me falta mucho para tal cosa –bajo la mirada avergonzada-…un arquero practicante de Kyûdô debe ser una persona sencilla, no debo alegrarme por un cumplido, debo seguir practicando para lograr mis tiros naturalmente –mientras se frotaba las mejillas-

Lyserg: Jaja ¿Por qué te preocupas tanto por eso? Pensé que al ser un deporte serian estrictos contigo en mejorar y ganar competencias –comento divertido por la actitud de la chica quien se tranquilizo y reposo sus manos sobre sus muslos-

Tsukawa: El fin del Kyûdô y seguramente la razón por la cual Hirai-sama pensó que podría ayudarme con mi entrenamiento Shaman es que debes lograr el Seisha seichu –en eso unió sus manos para sonreír a si misma mientras cerraba los ojos- es lograr tiros con la mente en blanco, ser uno con el arco y el blanco, es algo tan complejo y espiritual que aun cuando lleves más de 70 años practicando tal vez aun no lo logres, aunque mi sensei me dijo que depende de cada quien y que tal vez se me haga sencillo por el hecho de ser un shaman pero…el Kyûdô es, en mi opinión, una disciplina espiritual, es muy individual no muchos pueden entenderla bien –en eso le sonrió al chico mientras lo miraba de reojo- te impresionarías de los estudiantes de mayor edad, son personas muy interesantes, después de las practicas algunas veces me quedaba hablando con ellos, como algunos viven solos o sus nietos e hijos no los atienden, se alegran cuando me quedo con ellos

Lyserg: Y supongo que a ti te emocionaba también charlar con esas personas –dijo sonriéndole-

Tsukawa: Son muy buenas personas solo que los fueron ignorando a medida que envejecían…algunas veces me pongo en sus zapatos –dando una tranquila sonrisa mientras el chico la miraba atento- ¿Qué pasaría si yo llegara a esa edad y nadie me escuchara o me tomara en cuenta? Sería algo triste, yo solo los escuché una vez por casualidad y me parecieron tan interesantes las cosas que contaban que creo que hasta ellos notaron como yo disfrutaba escucharlos que lo tomaron como costumbre después de las practicas –en eso miró nerviosa a Lyserg mientras movía las manos- e-e-eh lo siento creo que estoy hablando de más, no fue mi intención extenderme tanto, seguro ya estas aburrido ¿d-de que quieres hablar tú Lyserg?

Lyserg: ¿Hm? ¿De qué hablar? –El chico solo la miro un momento en silencio hasta que le sonrió- en realidad me parece agradable la charla además…si no soy yo entonces quien te podría escuchar –la chica se sonrojo mientras lo observaba perpleja, el chico solo apoyo su mano sobre su cabeza y rió paro si- no tienes que tener muchos años para contar historias interesantes y ser buena persona –la chica bajo la mirada sonriente mientras sus mejillas enrojecían y con la voz muy baja le agradeció por sus cumplidos jugando con sus dedos, el chico solo se volvió a reír de ella, le parecía que era alguien muy dulce, para sus adentros el joven en realidad agradecía haberla conocido ya mayor ya que seguramente sí la hubiera conocido en el torneo la hubiera tratado diferente, más frio y brusco, con los años había aprendido a no ser tan cabeza dura-

Tsukawa: ¿Qué es tan gracioso? –le preguntó curiosa mientras lo miraba de lado al notar como el chico se sonreía a sí mismo, el chico miró a la chica y después volvió a reír divertido para sí-

Lyserg: Nada, solo que tu charla me hizo recordar algo que me sucedió hace mucho

Tsukawa: ¿Algo muy bueno? –el chico pensó un momento moviendo sus ojos al techo pero después bajo la mirada y le asintió- jejeje, me da gusto –comento sonriente, ambos siguieron charlando tranquilamente hasta llegar al hotel; Si, agradecía haberla conocido en esta época, tal vez una persona tan dulce como ella lo ayudaría a él dejar de serlo…no, desde hace mucho lo había estado haciendo, poco a poco le había enseñado a ser más relajado sin que ella misma se diera cuenta, debía agradecerle de alguna manera; al detenerse el autobús todos fueron saliendo y él le tomo la mano, podría pedirle salir mañana o pasado, debía aprovechar esta pequeña oportunidad, no podía perderla tal como le acaba de enseñarle-

Yoh: ¡Hana no corras! –le avisó el joven a su hijo mientras este bajaba saltando las escaleras del autobús, poco a poco fueron saliendo todos con sus cosas y confirmaron que a nadie se le había olvidado nada;

La rubia miró a su alrededor, era su oportunidad, debía escapar mientras podía ¿pero a donde?, ¡por supuesto! El malecón, nadie de ellas querrá ir allá, todos irán a las habitaciones de seguro, están cansados-

Tsugumi: Baba, ¿puedes llevar mi bolso a la habitación? Daré un paseo por el malecón –ofreciéndole su bolso a lo que la chica lo tomó pero le brindo una cara no muy contenta, más bien sospechaba algo-

Tsubasa: ¿Te sientes bien Gumi? –La chica le asintió fingiendo una sonrisa mientras que la otra chica entrecerró los ojos, algo andaba mal aquí-… ¿Quieres que te acompañe? Podemos decirle a Tsuki y Wawa que suban nuestras cosas

Tsugumi: No te preocupes, solo quiero pensar un poco –guiñándole un ojo mientras tomaba su látigo y lo enrollaba a un lado de su cintura, ¡debía irse rápido!-

Tsubasa: Pero Gumi—

 En ese mismo instante se escuchó cómo se abrían las puertas principales mientras salían Tamao y Pilika, la primera algo preocupada y la otra muy enfadada; la castaña volteó curiosa a ver qué sucedía mientras aun tenía un brazo extendido por haber llamado a Tsugumi, ¿Qué rayos le pasaba a esas chicas? ¿Por qué tanto alboroto?; Hao por su parte notó cómo gracias al alboroto había aparecido una oportunidad para escabullirse, la había visto escapándose, esa ya era la gota que derramó el vaso, ahora en verdad si debía saber que sucedía, tal vez hasta sería más interesante que quedarse con el grupo de despistados. Observó a quien tenía cerca, Ryu y Chocolove, tomó el hombro del moreno para llamar su atención y le dijo algo rápido como que él se adelantaría a comprarse una bebida antes de subir a la habitación y sin más explicación se fue tras la rubia dejando a un confundido Chocolove tratando de entender lo que acababan de decirle y las quejas de la enfadada Pilika.

 Por su parte la rubia estaba tan concentrada en sus pensamientos que no se dió cuenta como el castaño la seguía, aunque no tan de cerca; pasando por la piscina del hotel pudo notar como una pareja conversaba en las tumbonas mientras tomaban unas bebidas, dando un resoplido adelantó el paso mientras bajaba la rampa para dirigirse a una caminera que pasaba por entre las canchas del hotel, a pesar de ser un largo camino aun podía notar huéspedes jugando golf o andando en bicicleta. Debía alejarse de las personas, necesitaba estar sola, necesitaba pensar, necesitaba despejar la mente de todo el caos que la atormentaba, necesitaba gritarle a las olas como se sentía, pero debía aguantar, debía asegurarse de no tener a nadie cerca.

 Ya al llegar a la playa notó felizmente como no había mucha gente, era de esperarse ya que estaba por anochecer; poco a poco las personas guardaban sus cosas pero algunos se quedaban admirando la playa, aun no estaba lo suficientemente lejos, debía irse más allá, así fuera al fin del mundo pero debía descargarse y sacar todos sus pesares del pecho, tan solo recordarlo una vez más hacia que sus ojos se aguaran pero dio un gran respiro y sacudió su cabeza, nada de llanto, ¡de ninguna manera! De repente, a un lado de la playa, lejos de las personas, pudo notar el malecón natural; Lo había visto el día que llegaron, era algo grande, habían muchas rocas a los lados y las olas chocaban contra ellas, no había nadie por los alrededores, era un lugar perfecto. Sonrió con satisfacción cuando noto que podía caminar hasta lo alto, era como un muelle natural hecho solo de rocas chatas y arena, la chica con cuidado empezó a subir sobre unas rocas para alcanzar la cima, otra vez sin notar como el mayor de los Asakura la observaba a lo lejos con cautela.

 ¡¿Un alma en pena?!

Tsukasa: ¿Están seguras que no fueron ataques? Tal vez los Ryugasaki si nos siguieron hasta aquí y decidieron sabotear el hotel –dijo la chica sorprendida mientras todos conversaban, estaban reunidos en las sillas del lobby, tal vez lo que sucedía si era más interesante de lo que Hao había pensado-

Anna: Fantasma o no, igual está sucediendo algo muy extraño aquí –cruzándose de brazos- ¿con que desordenando mi maleta? Me las pegara ese espíritu de pacotilla bueno para nada, lo mandare al lugar donde debería estar –apretando un puño mientras la rodeaba un aura oscura con fuego-

Lyserg: ¿Y no recuerdan algún otro suceso extraño que les haya pasado en el día? ¿Alguna señal de porque no haya logrado el descanso eterno?

Pilika: De lo que pudimos notar a quienes realmente asustó fueron gente joven y en el spa escuchamos que algunas personas se habían ido porque habían visto como se les aparecía una mujer en sus habitaciones por la noche

Manta: Eso explica porque hay tan poca gente, no es culpa del hotel, es porque los huéspedes le temen al fantasma que esta rondando

Tamao: Pero no lleva mucho tiempo, es decir, las encargadas del spa nos contaron que esos sucesos han estado pasando desde la semana pasada

Yoh: ¿La semana pasada? Tal vez alguien falleció cerca de aquí y ahora le gusta molestar a los huéspedes de este hotel

Pilika: Tal vez…lo único que nos dijeron fue que después de una boda que se celebró en el hotel la semana pasada, han estado sucediendo cosas extrañas

Tsukawa: ¿Una boda? –ambas chicas asintieron al mismo tiempo, a pesar de que ya tenían pistas, ninguna encajaba con la otra-

Ren: Un fantasma en pena que solo ataca personas jóvenes y empezó a actuar después de una boda –dijo cruzado de brazos mientras estaba apoyado al lado de un sillón donde estaban sentados Lyserg y Tsukawa, el chico volteo la mirada al joven de cabellos verdes y le sonrió confiado- ¿Qué esperas? Lúcete ya antes de que yo mismo lo descubra

Lyserg: Si…claro –mirando de reojo a Ren con algunas gotas en la nuca, el joven se aclaró la garganta y apoyo una mano bajo el mentón- con las pistas que tenemos podemos suponer que es una persona que murió joven o tal vez murió por culpa de alguien joven, sí juntamos el hecho de que apareció justo después de haberse celebrado una boda es muy probable y espero que disculpen mi atrevimiento pero mi conclusión es que el fantasma es una mujer de mediana edad –todas las chicas por un momento lo miraron un poco mal a lo que el chico alzó un poco sus manos demostrándoles que era inocente-

Manta: Pero tiene sentido –todas las miradas fueron directo a su persona, el chico sudo frio al notar como todas las chicas lo miraban con algo de rencor- n-no me miren así, puede que sea verdad, a diferencia de los hombres, las mujeres se preocupan más por su edad…t-tal vez a ese fantasma le enfada la gente joven porque seguramente ya no lo es  y-y-y tal vez le enfado mucho mas la boda porque hay gente joven y feliz celebrando además es muy probable que se haya enfadado por la novia…s-se supone que ese día debería de verse muy bien, s-seguro le enfado su juventud… ¡por favor dejen de mirarme así no es mi culpa!

Yoh: Jijiji de todas maneras podríamos pasear el hotel para buscarla –sonrió despreocupado mientras estaba sentado en un sillón con una de sus piernas doblada sobre el- subamos las cosas y nos conseguimos en el lobby de nuevo, será divertido es como las pruebas de valor que hacen en verano

Horohoro: Suenas como un niño de primaria Yoh, nosotros no somos lo mejor para hacer pruebas de valor viendo fantasmas todos los días –dijo divertido el muchacho, todos rieron hasta que escucharon un grito a lo lejos, una pareja agarrada de manos salió del ascensor y corrió al área de la piscina, al parecer no será tan difícil encontrar al fantasma, pero justamente en ese momento la presencia desapareció por completo-

Tsubasa: ¿Pero qué les parece? La anciana loca no estaba tan lejos –sonriendo confiada mientras abrazaba una pierna flexionada que apoyaba en la silla donde estaba sentada-

Anna: Ya saben qué hacer, ahora muévanse no tengo todo el día –tomándole la mano a Hana para llevarlo con ella mientras Pilika y Tamao la seguían-

Yoh: Amidamaru, por favor, revisen los alrededores mientras nosotros nos preparamos, asegúrense de saber donde está o que es en realidad

Amidamaru: Por supuesto Yoh-dono –en eso aparecieron Bason y Tokagerô detrás del samurái-

Bason: Nosotros ayudaremos también Bocchama –dijo con mucho respeto el guerrero chino a su amo quien asintió mientras seguía caminando-

Ren: En ese caso no hay más que decir –poco a poco todos fueron subiendo a las habitaciones; mientras tanto en la playa Hao observaba de lejos curioso a la joven rubia a quien había seguido todo el camino hasta ahí-

Hao:…que extraño…no piensa en nada –dijo mientras observaba como la chica estaba en la punta del malecón sobre una de las rocas más grandes, simplemente estaba allí parada viendo el océano, su cabello volaba gracias a la brisa pero ella no movía un músculo, solo suspiraba de vez en cuando; después de pensarlo un poco, el chico decidió aventurarse, subió con agilidad las rocas al inicio del rompeolas para después caminar despacio a donde estaba Tsugumi, ella no se había dado cuenta de su presencia hasta que el joven le toco el hombro… justo en ese momento pudo notar como la chica volteaba de golpe dándole una penetrante mirada mientras que sin previo aviso casi le estampa su puño en el rostro, el castaño logro bloquearlo con facilidad al igual que todos los golpes que sin duda le siguieron al primero-

Tsugumi: ¿QUÉ DEMONIOS HACES AQUI? ¿ES QUE ACASO NO PUEDO ESTAR NI UN MINUTO A SOLAS SIN QUE NADIE ESTE MOLESTANDOME? –Tsugumi gritaba histérica, puñetazo tras puñetazo la chica se quejaba mientras Hao lo único que alcanzaba a hacer era bloquear cada uno de los ataques, era de esperarse del joven Asakura- NO TE CANSAS DE SEGUIRME TODO EL TIEMPO COMO UN PAJARO CARROÑERO, DICIENDOME DEBIL, ¿QUÉ RAYOS TE IMPORTA? –La joven con mucha agilidad le lanzó varias patadas pero el Asakura seguía bloqueándolas- ¡NO SABES POR LO QUE ESTAMOS PASANDO! ¡Esa familia no nos dejara en paz nunca! ¡Persiguiéndonos como si fuéramos animales de caza! ¡Acaso piensas que todo esto es una broma! –poco a poco los golpes fueron siendo más débiles conforme dejaba de gritar, la chica se estaba cansando pero a pesar de todo seguía lanzando golpes a diestra y siniestra- ¡Es tan fácil para ti tener una vida sin alguna preocupación! –Hao debía admitirlo, la chica era buena en pelea, sí él hubiera sido una persona normal ya estaría acabado- ¡ya no puedo más! ¡Estoy harta! ¡Estoy harta de soportarte a ti! ¡Estoy harta de tener que verlo siempre! –ya podía sentir como la chica llegaba a su límite, los golpes ya no tenían la misma fuerza de antes al igual que sus gritos- no tengo por qué estar aquí…nunca debí haber venido –ya el chico apenas se movía, no tenia porque ya que la chica apenas podía lanzarle un golpe- cada vez que lo veo me destroza por dentro… pero debo estar aquí, debo sonreír por ellas…ellas se merecen que las apoye…pero ya no puedo más…no lo puedo soportar un minuto más –y con lo último que dijo se dejo caer al suelo de rodillas exhausta mientras su cabello cubría su rostro y en un hilo de voz pronunció-…quiero irme a casa…

 El joven solo la miró, no podía decir nada, no se había esperado nada de eso en lo absoluto, fue un completo ataque sorpresa, ambos quedaron en silencio, lo único que escuchaba era la fatigada respiración de Tsugumi.

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Lyserg: Según parece en el hotel ya no está así que será mejor seguir avanzando a la piscina y las canchas, ya en última instancia podríamos llegar a la playa –comento el joven mientras deshacía su posesión de objetos con su péndulo- muchas gracias Morphine –le dijo el chico a su espíritu-

Anna: Seguramente está en las camineras, si nos dividimos en grupos ordenados podremos encontrarla más rápido, Yoh y Hana vendrán conmigo, ustedes –dijo señalando repentinamente a Chocolove y Lyserg para luego señalar a las gemelas Ryugasaki y a Tsukawa- sí hacemos grupos de 3 cada uno de ustedes tendrá que estar en un grupo diferente –los 5 jóvenes se encogieron en hombros mientras observaban con quien irían a investigar-

Ren: Me parece bien –jalando a Chocolove mientras arrastraba por el cuello a Horohoro quien se quejaba de él- Chocolove me será de gran ayuda y seguramente este idiota querrá recordar viejos tiempos así que ya tengo mi grupo

Manta: Iré con Lyserg entonces –dijo el joven mientras caminaba al lado del muchacho pero Ryu lo saco del camino para abrazar efusivamente a Lyserg-

Ryu: ¡Yo también estaré en el equipo de Lyserg! –Llevándose al joven con él mientras todos los observaban extraño y con gotas en la nuca-

Pilika: ¡Nuestro grupo tendrá a Tsukawa! –Jalando con ella tanto a Tamao como a Tsukawa por sus manos-

Tsubasa: En ese caso nosotras le daremos un repaso a la zona en caso de escuchar algún grito –señalándose a sí misma con su pulgar mientras abrazaba por el cuello a Tsukasa quien daba un pesado suspiro y bajaba sus orejas de zorro ya que ambas habían hecho posesión de almas. En ese preciso momento ambas levantaron las orejas alerta al igual que Tsukawa mientras que Chocolove se quedaba quieto-

Chocolove: Se escuchan gritos a la lejanía

Tsukawa: Y se están acercando desde aquella dirección –señalando la rampa de la piscina-

Tsubasa: No la perderé esta vez entonces –sonriendo divertida mientras empezó a saltar ágilmente entre algunas palmeras y objetos altos rampa abajo en dirección a las canchas, Tsukasa por su parte se quedó de brazos cruzados observando por donde se había ido su hermana-

Horohoro: ¿No iras con ella? –preguntó curioso el chico a lo que ella movió una oreja y colocando un dedo sobre su boca le dijo en mímica que guardara silencio, poco después señaló la ruta mientras colocaba una mano en su cintura, todos observaron atentos hasta que vieron como una palmera se movía a lo lejos-        

Tsubasa: ¡Oh demonios! –Exclamo la chica de repente, mientras se escucho como caía en los matorrales, todos voltearon a ver a su gemela con gotas en la nuca-

Chocolove: ¿Estará bien? –Preguntó el joven ya que con ayuda de su posesión podía escuchar todas las maldiciones que decía la joven-  

Tsukasa: No te preocupes Chocolove, a ella le pasan esas cosas todo el tiempo –sonriendo mientras cruzaba los brazos y su cola de zorro se movía un poco al igual que sus orejas y como Chocolove y Tsukawa habían dicho, se vio subir a un grupo de jóvenes por la rampa hasta la piscina y seguir hasta el hotel, el fantasma no estaba tan lejos, pero mientras bajaban observaron a lo lejos a Amidamaru, Bason y Tokagerô-

Amidamaru: ¡Y-Yoh-dono! –exclamo el fantasma mientras se acercaba flotando-

Yoh: ¿Lograste ver algo Amidamaru? Acaba de venir un grupo de allí –Preguntó sonriente mientras llevaba a Hana de una mano- ¿Qué sucede? –Preguntó al notar como los tres espíritus bajaban la cabeza con gotas en la nuca-

Amidamaru: L-la verdad…es que –dijo el fantasma mientras se rascaba una mejilla con un dedo-

Bason: Esta vez se asustaron de nosotros –comento el guerrero con algunas gotas en la nuca para después flotar cerca de Ren transformándose en Hitodama- discúlpeme Ren-bocchama por mi ineficiencia   

Ren: No hay de otra –dijo con fastidio mientras bajaban con el grupo hasta el lugar donde había caído Tsubasa-

Tsukawa: Justo allá –dijo corriendo a los matorrales donde había caído su hermana por no apoyarse bien en una palmera- ¿te encuentras bien onê-chan?

Tsukasa: Ese tipo de arboles no es tan seguro y resistente, deberías saberlo ya –cruzada de brazos mientras la miraba con algunas gotas en la nuca-

Tsubasa: Cállate y ayúdame –dijo la chica algo enfadada con algunas plantas sobre ella, sus hermanas la ayudaron a pararse y mientras se quitaba algunas hojas del cabello y la ropa llegaron Horohoro y Ren junto con Chocolove-

Ren: ¿Pudiste ver algo al menos? –Cruzándose de brazos a lo que la chica coloco las manos en la cintura inflando sus mejillas-

Tsubasa: Por supuesto, ¿Quién crees que soy? Logre verla pero desapareció muy rápido, fue cuando las demás personas vieron a Amidamaru y los demás

Horohoro: ¿Viste como era exactamente?

Tsubasa: Hmm…era una mujer adulta, el cabello lo traía sujeto con una trenza y su ropa parecía una bata para dormir

Tsukasa: ¿Bata para dormir?

Tsubasa: ¡Sí! Por eso la reconocí fácilmente, quien andaría con eso afuera del hotel –alzando su dedo índice- son como los vestidos de lingerie que tú te rehúsas a usar –riendo divertida mientras su hermana se quejaba e inmediatamente le estampaba su puño en el rostro-

Yoh: Ahora será más fácil encontrarla

Anna: Harán lo siguiente, acorralaremos al fantasma en las canchas, bordearemos la zona para atraparla, ustedes dos –señalando a las gemelas- vayan a lo más alejado ya que podrán revisar mejor la zona en cuanto a los demás ya saben que hacer –todos asintieron al mismo tiempo y rápidamente se esparcieron por el lugar-    

 Lejos de todo ese alboroto estaban Hao y Tsugumi sentados sobre la gran roca en la punta del malecón, ambos guardaban un incomodo silencio, hasta que la rubia después de dar un pesado suspiro, miró el mar y juntando sus manos sobre sus muslos se dignó finalmente a hablar.  

Tsugumi: A decir verdad…yo no estoy muy acostumbrada a estar sin ellas. No es que no pueda estar sola sino que simplemente nunca hemos estado separadas…yo no soportaría estarlo, así que aunque me daba un poco de miedo el conocerlo ¿Qué podría perder? ¿Por qué no podría correr con la misma suerte que ellas?...Así que tome mis cosas y a la primera oportunidad que tuve me fui, tal vez la carta de los Ryugasaki fue oportuna para mí, para darme en realidad una buena razón para ir –cerró los ojos un momento y dio un pequeño suspiro- Yoh…es tal cual y como lo había visto, es así de simple, tal y como imaginé que sería conocerlo –en eso dio una sonrisa para sí-…es dulce, amable, divertido, y atesora tanto a su familia –su mirada se volvió melancólica- ¿Por qué no iba a correr con la misma suerte que ellas entonces? Después de todo este tiempo, toda la búsqueda y a pesar de todo se les cumplió su deseo ¿verdad?, en mi vida las había visto tan felices, a pesar de que estemos pasando por algo tan difícil…ellas están realmente felices y…yo— -en eso la chica apretó las labios, se sentía culpable, no podía decirle así que guardo silencio-

Hao: Dilo –dijo al fin el chico después de permanecer callado todo ese tiempo-

Tsugumi: No puedo…

Hao: ¿Quién mas te va a escuchar aquí? ¿Estás sola verdad? ¿Por qué no puedes ser egoísta ni siquiera cuando no hay nadie que vaya a juzgarte? –Dijo como si nada mientras apoyaba sus manos detrás de él para estirar un poco las piernas, el joven había leído los pensamientos de la joven, había visto a través de ella y ahora el simple hecho de que alguien más lo supiera la avergonzaba-

Tsugumi: Tu estas aquí –dijo apretando los labios-

Hao: No tiene ningún provecho para mí el juzgarte, no gano absolutamente nada con algo como eso –dijo relajado y noto que la chica volvió a guardar silencio, el joven cerró los ojos y se recostó en la roca donde estaba- habla, se sincera contigo por una vez… deberías quitarte esa mascara de vez en cuando –la joven volteó ofendida a verlo, ¿Cómo se atrevía? Pero…-

Tsugumi: ¿Será…que hice algo mal? ¿Será que en verdad yo no me lo merezco? –dijo en susurros, le dolía lo que decía, sentía pena de sí misma por lo que la atormentaba, la chica bajó la cabeza melancólica y siguió hablando no solo con el joven si no consigo misma-…todo pareció tan fácil para ellas, ellas obtuvieron lo que en realidad querían y fueron correspondidas…ya no están solas, alcanzaron la oportunidad de expandir su pequeño mundo con personas que las quieren, que espero en verdad las quieran, porque…nunca las había visto tan felices, mis hermanas…se merecen toda esa felicidad, merecen que puedan decir que ya no somos solo las 4 pero… ¿porque tuve que ser diferente? ¿Por qué yo no pude tener al menos un poco de esa felicidad? No tuve si quiera la oportunidad de acercarme a él, dejar que me conociera, de que viera que en realidad existo, de enamorarlo…ni siquiera la oportunidad de que pudiera decidir si me quería…

 La jovencita guardó silencio un momento y subió sus piernas para abrazarlas contra ella mientras apoyaba su mentón sobre sus rodillas, dio un pesado suspiro y siguió.

Tsugumi: Como si no fuera suficiente también tengo que quedarme aquí, y verlo…verlo todos los días y hacerme mil preguntas, ¿Qué hubiera pasado sí?, verlo con su familia perfecta –escondió un poco su rostro entre sus piernas, estaba volviendo ese sentimiento de frustración a ella- ver cómo a pesar de que ella lo trate de una manera tan ruda y casi sin sentimientos, él lo único que hace es sonreír…y lo peor, es que no puedo odiarlo, solo tengo que quedarme aquí…completamente sola mientras todos los demás están en su pequeño mundo feliz -El chico se volvió a sentar y dejo que le brisa dejara volar su cabello-

Hao: ¿Se lo has dicho a tus hermanas?

Tsugumi: ¡Por supuesto que no!... –exclamó alzando la mirada pero después escondió de nuevo su cabeza entre sus piernas- yo no quiero ser la persona que le arruine su felicidad, sí tengo que soportar toda esta tortura a ser la causa de sus preocupaciones prefiero hacerlo, no quiero volverlas a ver tristes y menos por mi culpa

Hao: ¿Por qué? Es mucho más fácil pensar en ti misma y ahorrarte tantos problemas, aunque claro, supongo que tú desconoces la palabra egoísta

Tsugumi: Jamás… ¡jamás! me perdonaría ser egoísta con ellas –en eso la chica escuchó el suspiro del muchacho y ella levantó la mirada para verlo de reojo-

Hao: Sí no vas a hacer nada entonces de que te estás quejando tanto –dijo mientras se volvía a recostar despreocupado, la chica lo miró enfadada y entrecerró los ojos-

Tsugumi: No se supone que iba a terminar quejándome con nadie, nunca me espere que un parasito curioso como tu viniera tras de mí –en eso el chico rió un poco por el comentario, no le afectaba en lo absoluto, la chica por su parte volteó la mirada de nuevo al mar y abrazó un poco mas sus piernas- solo me siento sola es todo…yo no soy como ellas, nadie se acerca a mí con naturalidad como puede pasar con las gemelas o con Wawa, ellas a pesar de todo llaman la atención porque puedes jugar o charlar y son buena compañía

Hao: Pero tú no pones de tu parte –dijo sonriendo para sí para después hacerse el ofendido- yo trate de crear un vinculo entre nosotros y tú me despreciaste sin darme al menos otra oportunidad –comentó sarcásticamente-

Tsugumi: No creo que el acoso sexual sea la mejor manera de construir amistades, enfermo –dándole una sonrisa de lado siguiéndole el juego a lo que él joven volvió a reír divertido hasta que ambos guardaron silencio, solo se escuchaban las olas al pie del malecón-

Hao: Creo que deberías decírselo –comentó repentinamente a lo que la chica volteó a mirarlo de golpe algo sorprendida y el la miró de reojo-…lo que sientes, creo que deberías decírselo a mi hermano

Tsugumi: ¡¿Acaso estás loco?! ¿Qué cosa buena podría salir de todo eso? Es imposible

Hao: Hmm… ¿tú crees? –le preguntó son una sonrisa pero en eso pensó por un momento y se aclaró la garganta, no era fácil para él lo que iba a decir- yo aprendí…de mala manera que sí las cosas no se hablan y se guardan los sentimientos adentro, estos pueden transformarse en rencor y complicar toda clase de cosas sin ninguna necesidad, además…estoy seguro que Yoh lo apreciaría  -La joven guardo silencio, no sabía que decir, en eso Hao la miró de reojo y sonrío para sí con ironía- “siempre me tengo que topar con humanos que se complican por los demás…jeje son una pequeña plaga” –poco después la chica se levanto sin dirigirle la mirada al joven- ¿ya te vas? –pregunto curioso-

Tsugumi: Ahora me siento mal

Hao: ¿Por qué?

Tsugumi: Por tu culpa, te sentaste allí y escuchaste todas y cada una de mis quejas egoístas sin juzgarme

Hao: Eso no significa nada para mí –dijo mientras se encogía de hombros-

Tsugumi: Lo sé –guardó silencio y después sin muchas ganas dijo- pero sin embargo lo hiciste, y yo en cambio te juzgue desde el momento en que te conocí –mordió su labio inferior, le costaba admitir todo eso pero era verdad- tal vez no eres tan malo como yo pensaba –el joven despreocupado rió un poco y cruzó los brazos-

Hao: Tienes razón, creo que me debes una disculpa –dijo levantándose para quedar detrás de ella a lo que la chica volteó ofendida-

Tsugumi: Yo no pienso disculparme contigo –a lo que dio un resoplido y entrecerró los ojos- aunque tal vez lo piense dos veces en cuanto a lo cerdo que pensaba que eras –el Asakura volvió a reír divertido, esa mujer sacaba cada comentario-

Hao: Ya está por anochecer, deberíamos regresar –dijo metiendo sus manos en los bolsillos para empezar a caminar, dejándola atrás-

Tsugumi: Espera un momento –el castaño apenas si pudo voltear cuando la chica, sin ningún aviso, se le acercó rápidamente y le robó un beso, tal y como él había hecho con ella semanas atrás. El beso no duró mucho; al separarse, la chica caminó un poco, volteó su rostro hacia él y lo miró por encima del hombro con una sonrisa altiva mientras se cruzaba de brazos. El shamán parpadeó un par de veces, sorprendido, y por un momento la miró incrédulo… pero después de ver la expresión en su rostro lo entendió claramente, supo lo que en realidad había significado eso: esa sonrisa era un desafío, ella tenía la osadía de retarlo, el chico no tuvo de otra más que reír para sí, al parecer dos pueden jugar el mismo juego-

Ambos bajaron del malecón en silencio, sin haberse percatado del inesperado testigo de la escena que acababan de presentar. Hao volteó por un momento al malecón, pensando que había sentido algo, pero al no ver nada se encogió de hombros y siguió su camino, en ese momento no era nada importante para él. Los dos siguieron su camino de regreso sin saber que dejaban en el malecón precisamente lo que su grupo de amigos estaba buscando… su testigo había sido la mujer fantasma.

---

Tsubasa: Ya anocheció, ¿Dónde estará? –dijo cruzada de brazos mientras estaba montada en lo alto de una palmera, esta vez con más cautela-

Tsukasa: Seguro está escondida por los alrededores solo hay que estar muy pendiente –dijo la chica mientras caminaba y olía de vez en cuando por donde pasaba, sintió como su hermana saltó de la palmera para caer cerca de ella y colocar las manos en la cintura, se notaba algo seria o a decir verdad estaba enfadada-

Tsubasa: No hablo de ese tonto fantasma, hablo de Gumi, la he notado muy extraña el día de hoy –dijo cruzándose de brazos-

Tsukasa: Ahora que lo dices es verdad –colocando una mano bajo su mentón pero en eso vio como su hermana bajaba un poco la mirada, ella por su parte sonrió para sí- no te preocupes, dudo que sea por tu culpa

Tsubasa: Aún no lo sabemos, ¡puede ser cualquier cosa! Estamos hablando de Gumi

Tsukasa: Si, pero dudo que alguna de esas cosas seas tú como tal, ven vamos, tenemos que seguir buscando –tomándole una mano para llevarla con ella- la harás sentir mal si se entera lo que estás diciendo

Tsubasa: Supongamos que no tengo la culpa, pero algo le pasa ¡y yo averiguare que es! –Apretando un puño sonriendo confiada a lo que su gemela solo le sonrió con una gran gota en la nuca-

Tsukasa: Y supongo que mataras al culpable  

Tsubasa: Por supuesto –volteando a verla mientras le sonreía malévolamente y de la boca salía la lengua de una serpiente-

EEEEEL NOOOO EEEES MIII NOOOOOOOOVIOOOOOOOOOOOO

 Eso fue lo que escucharon de repente y sintieron un ligero temblor que no duró más de unos segundos, las gemelas al instante intercambiaron miradas, ¿podría ser?... no… ¿tal vez?  

Tsukasa: E-esa n-n-no fue Tsugumi –dijo volteando a ver a su hermana mientras a ambas mientras cubrían sus orejas y sudaban frío-

Tsubasa: V-vamos a ver qué paso jajaja jejeje –sonriendo nerviosa para empezar a saltar entre los árboles junto a su hermana para llegar al lugar donde escucharon el estruendoso grito de la rubia-

 Lo que no sabían las gemelas y el resto del grupo es que minutos antes de lo sucedido la rubia caminaba tranquilamente por el camino de piedras que pasaba por las canchas seguida muy de cerca de Hao pero lo que no esperaban era que el fantasma de la mujer de mediana edad, tal y como la había descrito Tsubasa los interceptara para asustarlos. Sin embargo, ambos chicos solo cruzaron los brazos y alzaron una ceja, estaban tan acostumbrados a este tipo de cosas que hicieron caso omiso de la fantasma.

Fantasma: ¡Por qué no se asustan! ¡Deberían asustarse y salir corriendo! –Ambos fruncieron un poco el ceño al mismo tiempo, que bueno que ya estaba muerta, pero solo uno de ellos si se lo tomo a pecho, Tsugumi volteó lentamente a ver a la fantasma con una gran vena en la frente, lo que le faltaba…- ¡Claro! Mírame con desprecio, yo tengo más problemas que tu ¡estoy muerta! Tú al menos estas con tu novio feliz ¡te odio! ¡Te odio! ¡Odio a la gente como ustedes! ¡Por su culpa estoy así! –al enfadarse la mujer fantasma fue tomando una forma diferente con largos brazos y sus uñas crecieron, era verdad lo que habían averiguado, era un fantasma en pena corrupto por algo que sucedió antes de su muerte- ¡Odio a las parejas!

Tsugumi: E-él…e-él –empezó a decir la chica lentamente mientras apretaba su puño donde ahora tomaba su látigo, estaba muy enfadada, un aura oscura la empezó a rodear a medida que el fantasma seguía quejándose, de todas las noches que podría habérsele aparecido un fantasma molesto, tuvo que haber sido esa-…e-el…no…e-él no…

Fantasma: ¡ES TU NOVIO! –eso fue un grave, muy grave error…-

Tsugumi: EEEEL NOOO EEEES MIII NOOOOOOOOOOVIIOOOOOOOOOOO –gritó la chica llena de ira para así rápidamente hacer posesión de objetos y agitando su látigo no dejó que el espíritu volviera a hablar, estuvo lanzándole ataques sin descanso haciendo que de vez en cuando el suelo temblara- ¡DEJENME TRANQUILA! ¡Te metiste con la persona equivocada! ¡No estoy de humor para soportar tus quejas menopáusicas! ¡Soy la única persona en esta cochina isla que no tiene pareja! ¡NO ME CULPES DE TUS PROBLEMAS!

 Después de tantos ataques, ya la fantasma estaba aturdido, había recibido tanto golpes seguidos sin manera de escaparse de ellos, ¿Quién era esa chica rubia tan extraña? No sabía que los humanos podían hacer eso; poco a poco fue llegando el resto del grupo para conseguirse a una histérica Tsugumi lanzando ataques a diestra y siniestra y a Hao solo viéndola un poco sorprendido, a todos les salió una gran gota en la nuca, esto de verdad que era un espectáculo.

Fantasma: P-p-pero--yo –la fantasma apenas podía hablar ya que la rubia no dejaba de atacarla-

Yoh: ¿Q-que sucede? –Llegando rápidamente con Hana en brazos, todos estaban sin habla y solo señalaron a la histérica rubia-

Fantasma: P-pero yo-- yo los ví-- -la rubia logró ver a Yoh al llegar y todo su rostro se enrojeció ¡no puede ser!, Por su parte Hao, al notar al recién llegado solo pudo cubrir parte de su rostro con una mano y con muchas gotitas en la nuca sonrió torcido- --pero yo los-vi bes--

Tsugumi: NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO –la rubia no dejó que terminara, rabiosa agitó su látigo y liberando una gran cantidad de poder espiritual mandó al espíritu al más allá de un solo golpe, todos quedaron boquiabiertos al ser testigos de tal acción y hubo un silencio sepulcral, más de uno temía por su propio pellejo después de ver tal cosa-

Tamao: I-impresionante…

Manta: N-nunca ví a nadie mandar al descanso eterno a un fantasma e-en contra de su voluntad –todos voltearon a ver a las hermanas de la rubia quienes solo reían nerviosas y les salían muchas gotas en su nuca-   

Tsukasa: T-Tsugumi… -logró articular para deshacer su posesión y caminar lentamente donde ella, la joven respiraba agitada después de todo el esfuerzo que había hecho mientras que los demás solo la miraban en shock-

Tsubasa: V-ven aquí Gumi jeje…-acercándose lentamente a la rubia mientras la tomaba por los hombros para llevarla al hotel con una sonreía nerviosa en el rostro- v-vamos a ir al hotel y vas a darte un delicioso y relajante baño jajaja…y después i-iremos a cenar algo delicioso en el restaurante que prefieras si… ¿Qué te parece?…o mejor, podemos pedir servicio al cuarto y vemos una película, una buena película jojojo…con algunos dulces que ganamos ayer… ¿N-nâ Gumi? –La chica solo se dejo llevar por la castaña mientras aun respiraba cansada-…buena chica, así, respira profundo…

Ren: Y yo que pensaba que ella al menos era más paciente, una es más explosiva que la otra sin duda –al instante tuvo que esquivar una cantidad de largas agujas que se dirigían a él a gran velocidad, el joven aun sorprendido alzó la mirada para ver como su ahora novia lo miraba de reojo enfadada mientras que la rodeaba un aura oscura, al chico le salió una gran gota en la nuca al ver como se volteaba de repente y seguía con su actitud de antes-

Tsubasa: Podríamos ir mañana al spa tal vez jojojo no me caería mal un masaje –llevándose a Tsugumi con ella mientras que frente al grupo solo pasaba una brisa fría; el mayor de los Asakura fue el único que pudo reir ante tal escena, pero que chica tan interesante; tal vez tendría algo con que entretenerse después de tanto tiempo-

Horohoro: O-Oni…ka… –apoyando sus manos sobre los hombros de Tsukasa y mirando tanto a la chica que tenia al frente como a su hermana con muchas gotas en la nuca; ellas solo le sonrieron nerviosas, no tenían con que defenderse en realidad-

 Después de lo sucedido, no volvieron a pasar cosas extrañas en el hotel, poco después de la cena se enteraron que la fantasma había sido una mujer quien se había suicidado un mes atrás por haber encontrado a su esposo durmiendo con una chica mucho más joven en la habitación; cumplida la labor fueron todos a descansar, muchos evitaron hablar con Tsugumi por el resto de la noche, no querían volver a enfadarla pero en realidad ella estaba más ocupada en sus propios asuntos que dándose cuenta de los demás.

 Al día siguiente sus hermanas salieron en citas con sus parejas mientras que Tsubasa y ella se quedaron en el spa del hotel disfrutando de todos los servicios que ofrecían, extrañaban algunos mimos que no habían podido darse debido a todo el estrés al que estaban sometidas, dando un gran demostración al momento de recibir los masajes en que sencillamente se quedaron dormidas en sus camas, estuvieron todo el día quejándose de los hombres, cada una por sus razones, se tomaron su tiempo para ir a almorzar aprovechando que el grupo estaba disfrutando la piscina y fueron juntas a uno de los restaurantes.

Tsubasa: Aff…nos hacía falta algo así ¿ Gumi? –sentándose cómodamente en una de las mesas mientras miraba sonriente sus uñas arregladas- de vez en cuando hay que descansar y arreglarse, esto de entrenar y entrenar algunas veces nos hace ver tan masculinas

Tsugumi: Tú eres la que entrena como obsesiva compulsiva –mirándola de reojo por sobre el menú-

Tsubasa: ¡Porque quiero ser fuerte! Pero no me molesta que me den mimos de vez en cuando, y arreglarme el cabello y las uñas, hay que verse bien, tú misma lo dices

Tsugumi: Si, supongo –sonriendo un poco-

Tsubasa: Si te ves bien también te sentirás bien –sonriéndole divertida mientras apoyaba su cabeza sobre sus manos y los codos sobre la mesa- ¿te sientes más relajada?

Tsugumi: Como si me hubiera quitado un gran peso de encima –sonriéndole dulce mientras notaba como la sonrisa de su prima se ampliaba, poco rato después llegó su comida y ambas empezaron a comer tranquilas hasta que Tsugumi levantó su té frio- ¡por los spa!

Tsubasa: ¡Hya!¡Por los spa! –brindaron con sus bebidas bajo la mirada de algunas personas para después seguir comiendo, sin duda la rubia se sentía mejor pero aun tenía pendiente una cosa, debía sacarse una ultima espina del pecho, miró su bebida con interés y sonrió para sí mientras disimuladamente rozaba el vaso de su hermana con el de ella-

“Por tener la fuerza necesaria para mi nuevo comienzo”
 

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